Los niños le adoran, y no es para menos ya que se lo pasan genial con él. Tiene un ritmo y una sonrisa que contagia a la gente. Se define como un "apasionado padre", pero lo cierto es que la grada 'baila' si él está presente. Es Víctor Uwagba (Nigeria, 1975), animador infantil y miembro de la comisión social del Club Baloncesto Santa Maria.
P Dinamizador, animador...
R Depende de las circunstancias y el contexto. Soy profesional autónomo en animación infantil, dinamización juvenil y mediación social intercultural, entre otras cosas. Pero en el contexto del baloncesto y Santa Maria, soy un apasionado padre.
P Comisión social del CB Santa Maria. ¿Qué se pretende?
R El objetivo principal es organizar actividades lúdico-sociales para cohesionar transversalmente el club y crear comunidad. En la presentación de todos los equipos deportivos de Santa Maria llevamos a cabo una campaña de sensibilización, junto con el club de tenis, sobre la importancia de mantener las instalaciones deportivas limpias. Culminó en el diseño de carteles por parte de todos los jugadores, entre otras.
P Está plenamente integrado.
R Ya van 18 años en España (Mallorca) y como me gusta decir 'me siento afromallorquín'. Creo sinceramente que la integración es bidimensional. Supongo que el entorno familiar - "La meva dona és de Mancor de la Vall, dice- y laboral (socio-educativo) favorecieron mi comprensión del contexto socio-cultural de Mallorca. Ahora bien, hoy día casi me molesta cuando me señalan como un caso de integración positiva. Podría ser otra manera de seguir diferenciando al otro por ser diferente. Lo dejamos en que hay mallorquines de 'tos' los colores.
P Usted rebosa dinamismo, ritmo y alegría, ¿topa con la afición la mallorquina, que es fría?
R Tampoco acepto esta definición de la afición mallorquina. Habría que hacer un análisis multi-factorial del porqué se cree que los mallorquines son así. Si estamos de acuerdo en que la cultura está en constante evolución y que las personas hacen afición, afirmo que dependerá de los papás y mamás que saben animar bien.
P En apenas unos minutos anima a una grada o a decenas de niños. ¿Cómo lo hace?
R No lo sé [se ríe]. Los niños son un público soberano; o gusta, o no. Es ponerle pasión y disfrutar del momento. Lo captan. Confieso que disfruto mucho trabajando en temas de infancia y juventud. Ya son el presente, no el futuro.
P Usted ha hecho también distintas campañas, como una a favor de la igualdad de género.
R Sí. 'Campaña 25 hombres dando la cara contra la violencia machista'. Fue un privilegio y un honor. Es importante quedarnos con el mensaje y actuar consecuentemente. El silencio o la no actuación de los hombres nos hace cómplices.
P ¿Qué le gustaría conseguir como animador?
R Poner mi grano de arena para transmitir valores y actuar en consecuencia.
P ¿Hace falta más alegría en la sociedad?
R Hace falta más gratitud. Es la única manera de valorar lo que tenemos y disfrutarlo. Lo demás sucederá de forma natural.
P Usted creo el 'bàsquet ritmo'.
R Es una rama de mi taller de Percusión Interactiva. Consiste en crear notas o ritmos musicales botando la pelota sin perder el ritmo base. Además, utilizo vocabularios de los entrenadores como 'cambio de ritmo' o 'flexionar' para reforzar 'de forma lúdica y musical' estos conceptos.
