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Biografía musical

Piensa, escribe, dice, canta

Una chica sin suerte, un retazo de vida de Willie Mae Thorton, una de las grandes del blues

Willie Mae Thorton.

La literatura leonesa está de suerte; en las últimas semanas, dos de sus jóvenes escritores (si bien ya frisan los cuarenta años y tienen una obra extensa) han publicado sendas novelas, muy diferentes pero ambas altamente recomendables. Luis Artigue escribe una inquietante obra sobre una ciudad contemporánea donde, inesperadamente, deja de amanecer: Donde siempre es medianoche. Noemí Sabugal publica Una chica sin suerte, una biografía novelada de la gira europea que la cantante de blues Willie Mae Thornton, "Big Mama Thornton", realiza entre el 27 de septiembre y el 2 de noviembre de 1965.

La novela de Sabugal comienza con las palabras "Soy gorda. Y negra", una frase reminiscente del poema reivindicativo de la autora sudafricana Bessie Head "Cosas que no me gustan" (1962): "Soy Negra. / ¿Vale? / El sol potente y la geografía / me hicieron negra / y a causa de mi piel / me suceden muchas cosas / QUE NO ME GUSTAN [€]". Este inicio nos introduce en el estado de ánimo de la protagonista de la novela, quien, desde este momento, focalizará toda la narración, que está escrita en tercera persona.

La obra está dividida en cuatro partes y 29 capítulos breves, cada uno dedicado a las diferentes ciudades europeas de la gira, que incluyó también Barcelona. Al inicio de cada parte hay unas páginas con epígrafes cortos, en primera persona, subtitulados "Escribe", "Dice", "Piensa", en los que Big Mama Thornton reflexiona sobre su situación actual y rememora pasajes de su vida. A los tres verbos señalados debiéramos añadir otro: "Canta"; porque la génesis y la cronología de sus canciones van modulando la biografía de la intérprete, autodidacta, "me enseñé a mi misma a cantar y a tocar la armónica y la batería".

Como en el poema de Head, una buena parte de las dificultades de Thornton se deriva de su condición de mujer negra. Es discriminada por la sociedad de su lugar de nacimiento, Alabama en 1926, por ser negra; es discriminada por su padre por ser mujer, y es invisibilizada por todo el mundo por ser pobre. Solamente los escenarios y los aplausos de la audiencia le hacen creer fugazmente que "como dice el doctor King el cambio es imparable". Pero no puede olvidar que ella y su banda "han vivido también la humillación de tocar en locales en los que no podían ni entrar al retrete, o la de dormir en el coche por no encontrar ningún hotel que les alojase".

No es de extrañar, pues, que Willie Mae Thornton, a pesar de sus dotes musicales, de su prodigiosa fuerza vocal y del éxito de canciones como "Hound Dog" o "Down Home Shakedown", se sienta constantemente desazonada: "Tiene miedo. No está segura de nada. Lo teme todo [€] y siente como si se abriera un agujero bajo sus pies". La oportunidad que le brinda esta gira europea y el nuevo disco que va a grabar al llegar a Londres se le antojan trampas que la vida pone en su camino para frustrarla una vez más. Esa sensación de peligro sólo la combaten, fuera del escenario, el whisky, el bourbon y la marihuana.

"Unlucky Girl", la canción que su amigo Jack Dupree le escribe para el disco de fin de gira, se convierte en el lema de su vida y en el título de la novela. Pero como mientras hay aliento debe haber esperanza, la obra termina con una retahíla de frases condicionales y a la vez desiderativas: "Si me quieren sobre los escenarios, si el disco se vende y suena en la radio, si la cuenta corriente empieza a crecer y me cambio a una casa sin humedades en la pared [€].

Si tan sólo tuviera un poco de suerte".

The End.

Como la vida misma.

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