Diario de Mallorca

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De fiestas populares y populismos

Un recorrido de Sant Antoni a Sant Sebastiá - Ftur y la mallorca de cine - Premis Ciutat de Palma - Música, moda y más

Voy a empezar disculpándome con los protagonistas iniciales de esta crónica. Me caen bien, son buenos en su trabajo y cobran por ello, lo habitual. Pero basta ya. No puede ser, que el Consell de Mallorca, la tarde-noche que decide cerrar los cines Callao en Madrid, para presentar a bombo y platillo las bondades de la isla como plató cinematográfico, los "embajadores" del evento fueran Carolina Cerezuela y Jaume Anglada. Entiendo, de verdad, que son dos personajes conocidos -ella muy televisiva, por cierto-, y que tienen su tirón. Pero claro, si inviertes dinero público buscando atraer nuevos rodajes a Mallorca y la mayoría de los invitados a la cita fueran de la isla, pues para qué sirve. Que sí, que estuvieron el periodista Manuel Campo Vidal, el deportista Fernando Romay, el exembajador de Estados Unidos en España, James Costos, el presentador Raül Valls y los intérpretes Agnès Llobet, David Ordinas, Llum Barrera y Andreu Simón -¿a nadie se le ocurrió que fuera el reputado actor quien ejerciera de maestro de ceremonias?-, pero brilló por su ausencia la presencia de productores nacionales e internacionales. La repercusión mediática, pues la local, y ya va bien todo. Sorprende, además, que durante el evento titulado Mallorca en primer plano, se proyectara el capítulo dedicado a la isla de la serie china, Spain Passion. Y digo, sorprende, porque desde la institución insular no consta aportación alguna y durante el rodaje en la isla nada quisieron saber. El dinero llegó del sector privado pero los méritos me los llevo yo.

El caso de elegir embajadores o representantes de Mallorca por el mundo en función de los gustos de los cargos públicos del momento, me recuerda mucho a la época dorada de Josep Juan Cardona y sus viajes internacionales promocionando la gastronomía y moda mallorquina. Siempre, siempre, en la comitiva, la soprano Isabel Rosselló. Aún recuerdo el día en que, durante una rueda de prensa en Nueva York, se nos ocurrió preguntar si no había más cantantes líricas de nivel en la isla. Cómo acabó aquella historia, ya lo saben: Con cárcel para todos los protagonistas. Salvando mucho la distancias -o eso espero-, es tiempo de hacer un poquito de autocrítica y repensar a quién contratamos y para qué. Y es que aún se oye el eco de las carcajadas ahogadas de algunos de los invitados a la cita promocional en Callao de este pasado miércoles cuando uno de los presentes murmuró: "Ni en Madrid nos libramos de ellos (en referencia al dúo Cerezuela-Anglada)".

MALLORQUINES EN FITUR

Ya me van a perdonar que haya empezado por la última de las noticias de la semana que aparece ilustrada en esta crónica, pero me parecía lo más coherente ya que vamos a dedicar unas líneas a hablar de fiestas populares y quería mencionar cómo el populismo en las instituciones hace más daño que bien.

Dejar las fiestas en manos de quién realmente sabe organizarlas es siempre la mejor de las elecciones. No es de extrañar que los mallorquines que estos días han estado presentes en el recinto Ifema de Madrid con motivo de la Feria de Turismo, decidieran durante unas horas al día, abandonar el pabellón y disfrutar de las propuestas lúdicas que diversas empresas baleares han programado en la capital.

Muchos de los invitados al cine Callao acabaron la noche bailando al son de la música tropical. Nos encontramos con Mariana Chacón y Bernat Vidal -este es su año más especial (guiño)-, con la diseñadora de joyas Mar Aldeguer y su marido, Enrique Bermejo o con el relaciones públicas Tommy Ferragut. Con Dani Bonet, Rocío Abella, Maite Morales, Rosa Fontán y David Rico o con Bernat Cañellas, Carmen Martínez, Johanna Fernández, José Antonio Martínez, Jessica Noceras, Chema Holguín, Fina Montoro, Cristina Rosselló y Toni Vila, entre muchos otros.

A PESAR DEL TEMPORAL

Al pueblo no hay quien lo pare. Y si tiene ganas de celebración, mucho menos. Sant Antoni se despertó soleado y Sant Sebastià se acostó con ganas de llorar. La cara y la cruz de las fiestas populares más populares de Mallorca y que encuentran en enero su mes favorito.

En esta ocasión, invitados por la familia Moyà, de Licors Moyà, y que esté 2020 cumplen 130 años -ya les iremos contando los actos de su aniversario- vivimos Sant Antoni en Artà. Es costumbre que Joan Moyà y los suyos ofrezcan coca y bebidas espirituosas a todos los que se acerquen a saludarles, incluido los dimonis, que también tienen derecho al avituallamiento. El día acompañó y pudimos charlar con Sebastià, Joan, Biel y Bel Moyà, con Coloma Fullana, con Pep Joan Oliver y Antonia Clareta o con Antonio Artigues, Margalida Coll, Cristina Canet y Llorenç Gili. También nos encontramos con el alcalde de Artà, Manolo Galán, hermanado con el batle de Sencelles, Joan Carles Verd, junto a Cati Vallespir y Carme Barceló.

Si me lo permiten, creo que otras revetlas en Palma han estado más pasadas por agua que esta última. También entiendo que, si lleva todo el día lloviendo, dé más pereza salir. Lo cierto es que solo dos mil personas valientes desafiaron a la climatología, como Silvia Martínez, Lluïsa Ferrer y Maria Llompart, que fueron de las primeras en aplaudir al Drac de Na Coca. En la Escuela de Turismo Felipe Moreno encontraron refugio muchos, suerte de contar con lugares bajo techo. Torrando vimos a Laura Martínez, Isabel Sánchez, Francis Noguera, Natalia Martínez, Miguel Noguera y José Francisco e Isabel Martínez. También a miembros de la batucada Trasò, como Rosa Maria Cirer, Alejandro López, Maria Antònia Llull, Patricio Moncada o Yesenia Muñoz, reponiendo fuerzas. Perfectos anfitriones, Felipe y Maria José Moreno, siempre atentos al detalle.

UN ÚLTIMO APUNTE

O dos. El primero, gratamente sorprendida con el cambio de actitud de Rafa Nadal en cuanto hablar de su vida privada. Aún lo hace solo para los medios extranjeros pero, al menos, ya se le ve más natural. ¿Estará más sensible? ¿Alguna noticia en breve?

Y segundo, el protocolo exige que si un presidente de Gobierno lleva corbata, todos la lleven. Y si vas a Fitur, como máxima autoridad balear, lo mínimo es que estudies el vestuario para la ocasión.

LA MÚSICA DE LOS AÑOS SETENTA

José Ferrer fue el ponente de la primera de las tres sesiones previstas sobre la música de los 70, que se celebró en la Fundació Sa Nostra con la organización del Cercle d'Economia de Mallorca. Una audición guiada por las melodias de los años 1971, 1972 y 1973 y que tuvo como resultado "una música impresionante". No se lo perdieron, entre otros, Elena Leal, Xisca Roig o Bernat Togores.

CIUTAT DE PALMA

Con una gala muy musical que recordó los años dorados de el terreno, se rindió tributo a la cultura en los Premis Ciutat de Palma. Una ceremonia ágil que contó con la presencia de mucho público, ávido de disfrutar de las fiestas del patrón de Palma en el prácticamente único día sin lluvia. Nos encontramos con la agente consular de los EEUU en Baleares, Kimberly Marshall, con Marcos Augusto, Neus Vallori o Joan Miquel Seguí.

MAAZI, NUEVA FASHION STORE EN PALMA

El proyecto personal de marián fernández, ex directiva de inditex, desembarca en Palma tras consolidar sus tiendas en Madrid y A Coruña. Se trata de Maazi, un espacio que reune las mejores firmas nacionales e internaciones de moda femenina. A su inauguración acudieron, entre otras, Mima Ferrer, propietaria del hotel Hosta Cuba, Carmiña Segura o Ana Oliver.

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