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Negacionistas

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Tengo una amiga negacionista. Es inteligente, moderna, informada, de talante y pensamiento liberal: "Hay tantos argumentos a favor como en contra del cambio climático", me dice. "Es una constante a lo largo de la historia. Además, muchos se están aprovechando de los fondos que hay para este tema... Hay una politización del clima". Precisamente este el título de una entrada en el blog de Fernando del Pino Calvo-Sotelo.

Comienza diciéndonos que, aunque no pudo conocer a Al Gore, sí trató a Clinton. Ya sabemos quién es. Preocupado por los problemas del clima, porque es amante del mar y de la naturaleza, pudo departir con un ayudante de Gore: "Se limitó a repetir consignas algunas de las cuales carecían de base científica o incluso de lógica". Tras diez años de estudio concluye que hay más controversia que consenso sobre la teoría del cambio climático antrópico, que el alarmismo es pura propaganda y que se ha hecho de esto un modus vivendi para muchos.

Veamos los argumentos de Del Pino. En primer lugar, que el mayor responsable del efecto invernadero es el vapor de agua. Cierto. Una atmósfera más cálida contiene más vapor de agua, el cual evitará la disipación del calor que la tierra absorbe del sol. Es decir, se calienta más. Al calentarse más se produce más vapor: un mecanismo de realimentación. El vapor de agua se define como un potenciador de los otros agentes que producen el efecto invernadero: CO2, metano y óxido nitroso. Tiene una vida corta y se puede condensar en nubes que, a su vez, pueden causar precipitaciones. Cómo actúen las nubes respecto a la temperatura, dependerá de su altura, extensión y propiedades.

No, no es el vapor de agua el que está produciendo este aumento, aunque colabora. Es el CO2 y los otros dos agentes, en menor medida. Sin embargo, Del Pino dice que el CO2 aumenta 800 años antes que las temperaturas y que entre 1940 y 1975 la correlación fue negativa y que es muy débil en el XXI. El nivel medio de CO2 en 2019 es de 420 partes por millón (datos de la NASA). Nunca alcanzó ese nivel en 800.000 años examinados mediante técnicas de estudio del paleoclima. A lo largo de los milenios se producen oscilaciones. Esta podría ser una de ellas, lo que apoyaría a Del Pino. Pero 420 está muy por encima del máximo histórico, 300. Y nunca subió tan rápido. La elevación comienza con la revolución industrial y se acelera desde 1970. Que la causa sea la actividad humana industrial es la única hipótesis contemplable.

El calentamiento afecta a los océanos donde se está disolviendo el hielo con la inquietante consecuencia de la elevación del nivel del mar. Del Pino dice que esto solo ocurre en el Ártico. En el Antártico, que almacena mucho más hielo, la masa está creciendo. Efectivamente, en la Antártida no había, hasta recientemente, calentamiento ni disminución de la extensión de la superficie de hielo. Se explica por el cambio en los vientos, el agujero de ozono y otras causas. Pero de acuerdo con los datos de la NASA y la Agencia Europea Espacial, desde 2012 se pierden, y de manera acelerada, 127.000 millones de metros cúbicos al año. En el Ártico se perdió casi la mitad de superficie desde 1980. El que haya menos superficie helada afecta directamente a la temperatura porque los rayos del sol, en vez de reflejarse en el blanco, se hunden en el mar y lo calientan. Así calienta la atmósfera y desprende vapor de agua. Las causas naturales de las variaciones de temperatura incluyen los cambios en la potencia del sol, en la órbita de la Tierra alrededor del Sol, las erupciones volcánicas y las fluctuaciones internas en el sistema climático como El Niño y La Niña.

Mediante modelos climáticos robustos se ha simulado qué habría sucedido con las temperaturas globales si solo los factores naturales hubieran influido: durante el siglo XX se habría producido poco calentamiento o incluso un ligero enfriamiento. Cuando en el modelo se incluyen las influencias humanas en la composición de la atmósfera se obtienen los cambios observados. El CO2, el mayor culpable, ha aumentado un 40% en los últimos años. Y sabemos que es responsabilidad humana. No puede ocultar su procedencia. Es un gas que está en la atmósfera en continuo intercambio con la tierra: las plantas lo usan para la fotosíntesis, los seres vivos lo producimos en la combustión para obtener energía de los alimentos y en la descomposición de la materia orgánica, y hay un continuo intercambio entre la atmósfera y los mares. Se reconoce al CO2 "natural" porque su carbono contiene los isótopos C13 y C14, y prácticamente no se observa en la atmósfera aumento del CO2 con esos isótopos. Si el incremento del CO2 no proviene de causas naturales, ¿qué lo produce? La mejor explicación es la quema de combustibles fósiles.

Casi nadie niega ya el calentamiento. Se discute la influencia del ser humano. Negarla permite seguir utilizando las cuantiosas reservas de carbón, petróleo y gas. Esa es la cuestión.

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