¿Qué tal, don Manuel?
Monsieur Manuel.
O senyor Manel...
Manolo, dejémoslo en Manolo.
¿Qué sensaciones tiene después de estos días tan intensos?
Pues algo intermedio entre estar hasta las pelotas y la seguridad de estar rodeado de imbéciles.
¿Cree que Ciudadanos quería que la alcaldía fuera para ERC?
Lo que quieren los que dirigen Ciudadanos es un enigma tan confuso como la ubicación del fin del Universo. Y quizá el fin del Universo sea más sencillo de entender.
A lo mejor es que como ellos no hablan francés usted no les entiende...
Creo que si hablasen chino les entendería mejor. A esos tipos, cuanto más se les entiende, menos se les entiende, no sé si me explico.
Arrimadas, Girauta, Villegas y Rivera le han desautorizado a usted...
Cosa que, no me lo negará usted, añade más prestigio a mi historia política.
¿Pero en qué difiere usted exactamente de los dirigentes de Ciudadanos?
En lo que no me habían contado cuando vinieron como locos a buscarme...
¿Y qué es lo que no le habían contado?
Que Vox les quedaba a la izquierda.
¿No está exagerando un poco?
Un francés, desgraciadamente, nunca puede olvidarse de cuánto costó hacer las cosas correctamente hace 75 años.
Disculpe, pero Marine Le Pen es francesa.
Una de las cosas que uno debe tener muy clara en política es saber cuando avergonzarse, sí.
¿Se avergüenza de estar en Ciudadanos?
En la misma medida que si hubiera estado en la Luna. Nunca estuve.
¿Pero usted no ha evitado a Vox, lo que ha evitado es una alcaldía de ERC?
Digamos que hemos evitado el nacionalismo excluyente, o sea, ERC; o sea, Vox.
ERC es un partido democrático y de izquierda Claro, claro, y yo soy el heredero del trono de Checoslovaquia.
Usted no es checoslovaco ni Checoslovaquia es una monarquía.
Veo que me ha entendido usted perfectamente.
¿Cantará usted Els Segadors?
Els Segadors de la Patrie, le jour de gloire...
