En los vinos de larga crianza suele buscarse un entendimiento entre estos y la madera, a la vez que complejidad y un abanico de sensaciones abiertas a nuestros sentidos. Este cúmulo de aspectos sensitivos, especialmente impactantes en nariz, boca y vista suelen ser una constante en el tinto Reserva Especial Veritas, de José Luis Ferrer, heredero de los Gran Reserva y Reserva Etiqueta Negra de la citada bodega, ubicada en Binissalem. Hoy analizamos el Reserva Especial Veritas 2014, en el que sigue dominando el Manto Negro, que se combina a la vez con las Callet, Merlot y la Cabernet Souvignon. Pasó unos veinte meses en barricas nuevas francesas y USA, esencialmente, con alrededor de un año en botella, descansando. Un rojo intenso domina su tonalidad, actualmente. La fruta madura aparece en nariz, junto a notas de varias especias. Hay presencia de taninos elegantes y golosos en boca, con elegante y largo final. Tendrá larga vida si se le cuida bien.
