Tribunales

Condenado a ocho años de cárcel por forzar a una migrante a prostituirse: "Soy de la mafia rusa, te mataré y te tiraré al mar"

El acusado engañó a la víctima para que viajara de Ecuador a Mallorca con falsas promesas de trabajo

Los dos acusados, durante el juicio en la Audiencia Provincial de Palma.

Los dos acusados, durante el juicio en la Audiencia Provincial de Palma. / M.O.I.

Marcos Ollés

Marcos Ollés

Palma

La Audiencia Provincial de Palma ha condenado a ocho años de prisión a un hombre por obligar a una migrante a ejercer la prostitución en Mallorca tras engañarla con falsas promesas de trabajo para que viniera de Ecuador a España. Cuando llegó a la isla, le dijo que era miembro de una mafia rusa y la obligó a ofrecer servicios sexuales en pisos de Inca y Alcúdia para saldar la deuda del viaje. La sentencia impone también dos años y medio de prisión a la mujer que controlaba uno de estos inmuebles por lucrarse con la víctima. Los dos condenados deberán indemnizar a la mujer con 15.000 euros.

La sentencia de la sección primera relata que el acusado contactó en 2019 con una joven venezolana de 21 años que vivía en Ecuador. El hombre sabía que atravesaba una precaria situación y que su hija, una niña, acababa de terminar un tratamiento contra el cáncer. Aprovechando su vulnerabilidad, le ofreció un trabajo en Mallorca en el sector de la hostelería y le gestionó la compra del billete de avión por 2.000 dólares.

La mujer llegó a la isla en noviembre de 2019 y el acusado la recogió en Son Sant Joan. Le dijo entonces que debía ejercer la prostitución en un piso de Alcúdia y entregar parte de los beneficios para saldar una deuda de 4.000 euros. Además, la amenazó asegurando que trabajaba para una mafia rusa y que si no le hacía caso la mataría y la tiraría al mar.

La víctima se vio así forzada a ofrecer servicios sexuales en la vivienda, que estaba gestionada por la otra procesada. La sentencia destaca que la víctima «no tenía alternativa», ya que «estaba atemorizada, no tenía dinero, se encontraba en un país extranjero sin apoyo familiar y tampoco conocía a nadie que no fuera el acusado».

Sin pasaporte

El tribunal considera acreditado que la mujer que regentaba el piso de Alcúdia se aprovechó de la situación de la víctima, le quitó el pasaporte y le explicó que debía estar disponible las 24 horas del día. Los dos acusados se repartieron el dinero que le iba entregando la mujer, que debía aportar el 40 por ciento de los beneficios que consiguiera prostituyéndose. La mujer estuvo unos días en ese inmueble y acabó en un chalé de la zona de Inca, controlado también por los encausados.

Proxenetismo

La sala declara al hombre autor de un delito de trata de seres humanos en concurso con otro de prostitución coactiva, por el que le impone ocho años de prisión y orden de alejamiento de la víctima de diez años. A la mujer la declara autora de un delito de proxenetismo, por el que la condena a dos años y medio de cárcel. La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante el Tribunal Superior de Justicia.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents