La familia de los dos desaparecidos en aguas de El Toro pide ayuda para encontrarles

Los allegados de Juan Herrera, de 67 años, y Angelita Silva de Souza, de 57, los dos desaparecidos desde el sábado cuando salieron a navegar por la costa de Calvià, no pierden la esperanza de encontrarles. El hombre es un experto navegante y la mujer, una excelente nadadora. Sus familiares han pedido ayuda a los navegantes que recorran la zona entre sa Dragonera y El Toro para que extremen la vigilancia en un intento de localizarles.

Buscan en aguas de El Toro a una pareja desaparecida tras salir a navegar

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Según explican los familiares de los dos desaparecidos en un comunicado difundido en las redes sociales, la pareja salió el pasado sábado por la mañana de Port Adriano a bordo de la Zaragall, una lancha motora de siete metros de eslora propiedad de Juan Herrera. Cuando no regresaron a puerto esa tarde, sus allegados interpusieron la denuncia, lo que provocó que la Guardia Civil y Salvamento Marítimo pusieran en marcha un operativo de búsqueda.

Al día siguiente, el hijo de Angelita alquiló una embarcación y localizó la Zaragall a la deriva al noreste de sa Dragonera. No había nadie a bordo, pero no aparecieron señales de violencia y estaban todas sus pertenencias, lo que permite descartar que sufrieran un robo.

Tras analizar los aparatos de la embarcación se ha podido confirmar que estuvieron varias horas detenidos en un mismo punto, a unas nueve millas al sureste de El Toro, que es donde se está centrando en estos momentos la búsqueda, en la que participan varias embarcaciones de Salvamento Marítimo y la Guardia Civil.

Juan Herrera, de 67 años, era subinspector de la Policía Local de Calvià y se jubiló hace dos años. Se había comprado la Zaragall hace varios años, pero su familia explica que toda su vida ha sido muy aficionado al mar, ha tenido varios barcos y está considerado un navegante experto. La mujer, por su parte, que es propietaria de un comercio en Santa Ponça, es una excelente nadadora. Los allegado de la pareja mantienen la esperanza de que pudieran encontrarse en algún punto recóndido de la costa de Calvia o Andratx, y piden a los navegantes que extremen la vigilancia para trata de localizarles.