Detenido un hombre al intentar acuchillar a una patrulla de la Guardia Civil y de la Policía Local en Can Picafort
Los agentes entraron en su domicilio al oír gritos de sus hijos a los que agredió

Un agente de la Guardia Civil lleva detenido al presunto agresor. / GUARDIA CIVIL

Un hombre de 52 años intentó acuchillar a una patrulla de la Guardia Civil y agentes de la Policía Local en Can Picafort. El sujeto se abalanzó sobre ellos después de que entraran en el domicilio tras escuchar gritos desde el exterior de sus hijos, a los que había agredido. Los agentes le detuvieron por presuntos delitos de atentado a agentes de la autoridad, resistencia y desobediencia grave.
Los hechos ocurrieron el pasado jueves. Una patrulla de la Guardia Civil fue requerida por un ciudadano después de escuchar los gritos que procedían de un domicilio de Can Picafort. Hasta el lugar también acudieron agentes de la Policía Local de Santa MArgalida y ambos accedieron al interior del domicilio.
Dos jóvenes estaban en el inmueble y, al entrar los agentes, les indicaron que estaban siendo agredidos física y psicológicamente por su padre. A continuación les solicitaron que se marcharan y los efectivos de Guardia Civil y de la Policía Local se dirigieron a la cocina, donde se encontraba el progenitor. Este estaba muy alterado y agresivo y le instaron a que se tranquilizara antes de salir de la estancia. Lejos de acatar las órdenes, este cogió un cuchillo de grandes dimensiones, abrió la puerta y se abalanzó sobre ellos.
Refuerzos
Los agentes, que se encontraban cerca de la puerta del domicilio, retrocedieron y la cerraron para tratar de contenerle. Desde el exterior, la patrulla de la Guardia Civil solicitó la presencia de refuerzos y varios efectivos del instituto armado se desplazaron al lugar.
Cuando habían pasado unos minutos y después de varios intentos de diálogo para que depusiera su actitud, este abrió la puerta sorpresivamente y salió corriendo para abalanzarse sobre los agentes. Este mantuvo la actitud agresiva y vertió contra ellos amenazas graves. Tras constatar que no portaba ningún cuchillo, lograron reducirle y detenerle.
Hasta el lugar se desplazaron sanitarios, debido al estado de alteración y agresividad que presentaba. Fue trasladado al hospital de Inca, donde permaneció ingresado toda la noche, y a la mañana siguiente fue puesto a disposición judicial.
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