Piden 15 años de cárcel por violar a su hija durante más de una década

La Fiscalía reclama una condena de 15 años de prisión para un hombre acusado de abusos y agresiones sexuales reiteradas a su hija durante más de una década en Palma. El hombre, según el relato del ministerio público, la sometió a tocamientos y le obligó a practicarle felaciones de forma habitual desde que la menor tenía cinco años hasta que alcanzó la mayoría de edad. Tanto la Fiscalía como la acusación particular, que ejerce la víctima a través del abogado Pedro Garrido y reclama la misma pena, le imputan un delito continuado de agresión sexual. El juicio se celebrará en la Audiencia Provincial de Palma.

Los hechos, según narran las dos acusaciones en sus escritos de conclusiones provisionales, se remontan al año 2009, cuando la pequeña tenía cinco años. El hombre, «prevaliéndose de su condición de padre», comenzó a manosear a la niña y a forzarla a realizar masturbaciones mutuas. «Consiguió que la menor realizara lo que él demandaba por el respeto que ella le profesaba», señalan la Fiscalía y la acusación particular. El acusado entraba también en la habitación de la pequeña para acariciarle sus zonas íntimas. Durante el mismo periodo, el procesado supuestamente entró en el aseo cuando la niña estaba bañándose y la forzó a practicarle una felación.

Los abusos y agresiones sexuales se sucedieron durante todo el tiempo que la víctima estuvo residiendo en el domicilio familiar hasta el año 2022. Los tocamientos y abusos sexuales fueron habituales durante todo ese periodo. El caso salió a la luz cuando la víctima relató los hechos a una psicóloga que la trataba por sus problemas de ansiedad.

La joven presentó una denuncia por los abusos que había sufrido y un juzgado de instrucción de Palma abrió una investigación contra el hombre, que tiene ahora 64 años y no ha llegado a ser detenido. La magistrada cerró la investigación hace unas semanas y concluyó que existen indicios suficientes de criminalidad para juzgar al sospechoso. La víctima ha sufrido un trastorno emocional grave a consecuencia de los abusos sufridos, con ataques de pánico, y sigue bajo tratamiento psicológico.

Además de la condena de 15 años de prisión, las acusaciones reclaman que el acusado indemnice a su hija. La Fiscalía solicita una compensación de 10.000 euros para la joven, mientras la acusación particular pide 30.000. También exigen que se dicte una orden de alejamiento en favor de la víctima durante 17 y 25 años respectivamente. El caso será juzgado por la sección segunda de la Audiencia Provincial de Palma.