La residencia de ancianos Fontsana, en Son Armadans, que en la noche del pasado martes sufrió un incendio en la segunda planta del edificio, está recuperando poco a poco a la normalidad. Los 150 residentes, que tuvieron que ser desalojados, han logrado regresar a sus habitaciones, salvo a las que quedaron destruidas por el efecto de las llamas. La mayoría de ancianos pasó la noche en la residencia, salvo algunos de ellos que prefirieron dirigirse al domicilio de sus familiares. El fuego afectó a ocho habitaciones de la segunda planta.
El incendio, según han confirmado fuentes de los bomberos y de la Policía Nacional, se inició en la habitación 235, ubicada en la segunda planta y cuya ventana se sitúa sobre la entrada principal del edificio. Inicialmente los trabajadores intentaron sofocar llamas, pero fue imposible, porque el fuego se extendió con gran rapidez. Las llamas, finalmente, afectaron a un total de ocho habitaciones de este piso. La dirección de la residencia, como medida de seguridad, optó anoche por dejar vacía toda la planta. Se buscó otras habitaciones de otras plantas para que los ancianos pudieran pasar la noche, mientras se reparan los daños ocasionados por el fuego.
En el incendio no hubo que lamentar ninguna víctima. Solo tres personas resultaron heridas. Dos de ellas por inhalación de humo y la tercera por un ataque de ansiedad. Fueron trasladados al hospital de Son Espases, pero su estado no es grave. Se espera que todos ellos sean dados de alta en las próximas horas.
De momento se desconoce la causa del siniestro. Lo único que se sabe es el lugar dónde se inició. La Policía está investigando las causas y está previsto que se realice durante el día de hoy una inspección ocular de la habitación donde se inició el siniestro.

Catalina Cirer visita la residencia
Esta mañana la consellera de Asuntos Sociales, Catalina Cirer, se ha desplazado a la residencia de Son Armadans para interesarse por el estado de los ancianos. Cirer se ha entrevistado con el director del centro.
La empresa propietaria de la residencia Fontsana de Son Armadans ha emitido esta mañana un comunicado, agradeciendo la intervención inmediata de los bomberos de Palma y de todas las fuerzas de seguridad, “cuya intervención permitió su control y extinción”. También se agradeció la intervención de los servicios sanitarios, así como el comportamiento de los empleados, de los residentes y de los familiares.
La empresa ha confirmado que los 150 residentes fueron reubicados en sus habitaciones o en otras disponibles en el mismo centro. Sin embargo, algunos optaron por marcharse a pasar la noche a casa de sus familiares.
La residencia se ha puesto en contacto esta mañana con muchos familiares, sobre todo para tranquilizarles y confirmarles que la situación se había normalizado durante toda la mañana y que estaba previsto que esta tarde todos los residentes tendrían una habitación asignada.