La Policía sanciona al dueño de un restaurante de Palma que tenía a seis trabajadores en situación irregular

Agentes de la Policía Nacional han sancionado al dueño de un restaurante de la zona de la Soledad, en Palma, que tenía a seis trabajadores en situación irregular trabajando en el establecimiento, entre ellos un menor de edad. Al propietario, que tampoco tenía la documentación en regla, se le ha abierto un expediente de expulsión ya que había cumplido una larga condena por tráfico de drogas.

Los policías de la Unidad Contra Redes de Inmigración y Falsificación (UCRIF) realizaron una inspección el pasado martes sobre las siete de la tarde en un bar-restaurante de la barriada de la Soledad, ante las informaciones recibidas de que el propietario, de nacionalidad colombiana, contrataba de forma habitual a trabajadores en situación irregular.

Cuando los agentes entraron en el establecimiento había allí una veintena de clientes, la mayoría de origen extranjero. Los policías identificaron al personal que estaba atendiendo las mesas y trabajando en la cocina. Se trataba de siete personas, de los que únicamente una camarera estaba dada de alta en la Seguridad Social.

Los investigadores comprobaron que el propietario y dos de los trabajadores estaban en situación irregular en España, mientras que otros dos habían entrado en el país como turistas y se encontraban en periodo de estancia, pero no tenían tarjeta de residencia ni permiso de trabajo, por lo que estaban empleados de forma clandestina. Entre ellos había un menor de edad que estaba trabajando en la confección de "arepas" en las cocina.

Al propietario del establecimiento, un colombiano de 52 años, se le incoó un expediente de expulsión preferente ya que había cumplido en España una larga condena por tráfico de drogas.

La Policía ha trasladado la denuncia a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, para informar de la situación del personal del restaurante.

Posteriores gestiones de los agentes de la UCRIF han permitido detectar numerosos empadronamientos fraudulentos en las viviendas de los trabajadores identificados, por lo que se les incoará otros expedientes sancionadores por infracciones graves a la Ley de Extranjería. Se trata por lo general de casos que entran en España como turistas y se quedan a vivir en el país de forma irregular mientras intentan conseguir el permiso de residencia.