Patrimonio histórico

Sospechan que los robos en el Santuario de Lluc comenzaron hace varios años

El prior admite que tras la detención del sospechoso por sustraer más de cien piezas del museo y 25.000 euros revisarán los protocolos de seguridad

Redacción

El trabajador del santuario de Lluc detenido la semana pasada como autor del robo de cientos de piezas, algunas de gran valor histórico, del museo llevaría años actuando sin haber sido detectado. El prior, Marià Gastalver, ha admitido que el suceso les ha llevado a revisar los protocolos de seguridad en el recinto. De hecho, los robos fueron descubiertos por un particular, un aficionado a la joyería antigua, que había hecho fotos de unos cordoncillos de oro expuestos en el museo y que recientemente volvió a fotografiar y se dio cuenta de que eran falsificaciones.

La Guardia Civil ha mostrado esta mañana en la Comandancia de Palma parte de los objetos y el dinero que fueron recuperados durante un registro en el domicilio del detenido, en Inca. Se trata de más de un centenar de piezas, algunas de gran valor histórico, que están datadas desde la Prehistoria a los siglos XVIII y XIX. Los investigadores encontraron también, en un doble fondo en un armario de la vivienda, 25.000 euros presuntamente sustraídos a lo largo de los últimos meses de una caja fuerte del santuario y del cepillo de la iglesia.

VÍDEO | Estas son las piezas robadas del santuario de Lluc que encontró la Guardia Civil en el domicilio del sospechoso

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Según explica la Guardia Civil, el prior del santuario presentó una denuncia el pasado 20 de febrero alertando de la desaparición de más de 400 joyas y piezas históricas que estaban expuestas en el museo. La Policía Judicial de la Guardia Civil de Inca abrió una investigación y comprobó que varias de las piezas habían sido sustituidas por falsificaciones de bisutería. Las pesquisas resultaron muy laboriosas, ya que abarcaron a unas 150 personas relacionadas de alguna manera con el santuario. Finalmente el foco se centró en el encargado de mantenimiento del recinto, un hombre español de 56 años. Los agentes comprobaron que llevaba desde marzo del año pasado efectuando ventas de joyas en establecimientos de compraventa de oro. En un registro en su coche y su taquilla aparecieron ya varias piezas sustraídas. Posteriormente, en su domicilio, los investigadores encontraron una gran cantidad de objetos sustraídos, así como 25.000 euros en efectivo.

Algunas de las piezas recuperadas.

Algunas de las piezas recuperadas. / Guardia Civil

Los investigadores consideran que se han recuperado la mayor parte de los objetos que fueron sustraídos, aunque hay constancia de que al menos tres cordoncillos de oro, que fueron vendidos por trozos a establecimientos de compraventa de oro, han sido ya fundidos. Entre los objetos recuperados hay una colección de cruces de Malta valoradas en 80.000 euros.

Los investigadores sospechan que los robos en el santuario se remontan a varios años atrás