El acusado del crimen de Calas de Mallorca tenía decenas de antecedentes por delitos "especialmente violentos"

Una decena de agentes de la Policía Nacional han destacado hoy, en la segunda sesión del juicio, el abultado historial delictivo del joven acusado por el crimen de Calas de Mallorca (Manacor). Los funcionarios que investigaron el caso han señalado que Cristian N.R. acumulaba "casi 70 antecedentes" por hechos "especialmente violentos", la mayoría cometidos cuando todavía era menor de edad. Entre ellos, una agresión a un vecino suyo en Felanitx al que asestó siete cuchilladas durante una discusión por una bicicleta. De hecho, el procesado estuvo un tiempo en prisión por estos delitos, como él mismo explicó en su declaración. El joven está acusado ahora de matar de una paliza al exnovio de su pareja, al que supuestamente propinó un puñetazo en la sien y varias patadas en la cabeza cuando cayó al suelo.

Durante la vista que se celebra con jurado popular en la Audiencia Provincial de Palma, los agentes de la Policía Nacional que acudieron al lugar tras la agresión han contado que la víctima estaba "muy aturdida", sobre un charco de sangre, y "no se podía levantar". Los investigadores han contado que, según les relató un testigo, Cristian N.R. se había acercado al perjudicado por detrás y le había propinado un golpe en la cabeza, para luego patearle. Sobre el móvil de esta agresión han señalado que el acusado era el novio de la expareja de la víctima, Mohamed Yoube, marroquí de 28 años.

Los investigadores han explicado que el acusado y sus acompañantes no estaban ya en el lugar de los hechos cuando ellos llegaron. Dieron varias batidas por la zona, pero no lograron dar con ellos. Las gestiones permitieron identificar a Cristian N.R. como sospechoso y se dictó contra él una orden de busca y captura. El joven se presentó seis días después en la comisaría de la Policía Nacional de Manacor para entregarse.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 21 de julio de 2021 en un aparcamiento al aire libre situado junto a una discoteca en Calas de Mallorca. Las acusaciones sostienen que el procesado atacó a la víctima por celos y tras recriminarle que hablara con su pareja. Primero le pegó un puñetazo en la sien y luego, cuando su rival cayó al suelo ya inconsciente, le pateó la cabeza. La víctima ingresó en estado crítico en Son Espases y murió cuatro meses después por las graves lesiones sufridas. La fiscalía imputa a Cristian N.R. un delito de homicidio, por el que reclama una condena de 12 años de prisión. La acusación particular, ejercida por los familiares de la víctima, le acusan de asesinato y piden 22 años de cárcel. El abogado defensor solicita la absolución.