Tribunales

Condenado en Palma por atropellar a un vecino que le recriminó el volumen de la música

El acusado acepta un año y medio de prisión e indemnizar a la víctima con 8.000 euros - Arrolló dos veces con el coche a su rival y le golpeó en la cabeza con una barra de hierro

Marcos Ollés

Marcos Ollés

Un hombre ha sido condenado hoy a un año y medio de prisión por atropellar dos veces y golpear con una barra de hierro en la cabeza a un vecino durante una discusión por ruidos en Palma. El acusado se ha declarado autor de un delito de lesiones y se ha comprometido a indemnizar a la víctima con 8.000 euros. El acuerdo alcanzado entre las partes incluye una atenuante de reparación del daño, porque antes del juicio consignó 6.500 para compensar al perjudicado. Además, la pena de cárcel queda suspendida a condición de que no cometa nuevos delitos en los próximos tres años.

Los hechos ocurrieron hacia la una y cuarto de la madrugada del 10 de mayo de 2019 en la avenida de México, en la barriada de Nou Llevant. El acusado, de 34 años, estaba en su coche escuchando música a todo volumen con las ventanillas bajadas ante el edificio donde reside. Un vecino del inmueble, molesto por el ruido, bajó a la calle para exigirle que bajara la música. Comenzó ahí una discusión que fue subiendo de tono hasta que el acusado puso en marcha su vehículo y embistió a su rival. La víctima corrió hacia el edificio para refugiarse, pero el agresor fue tras él. Lo persiguió con el coche y acabó atropellando de nuevo a su vecino y embistiendo la puerta principal de la finca. Acto seguido, se apeó y cogió con una barra metálico, con la que golpeó al perjudicado en la cabeza.

La víctima sufrió importantes lesiones a consecuencia de esta brutal agresión y tuvo que ser hospitalizado. Tardó 20 días en recuperarse y como secuela le ha quedado un perjuicio estético por la desviación del tabique nasal.

El procesado fue detenido ese mismo día y la Fiscalía le imputó un delito de lesiones con instrumento peligroso, por el que reclamó una condena de tres años de prisión. Hoy, antes de la vista oral, los abogados del acusado, de la víctima -que ejercía la acusación particular- y el fiscal han alcanzado un acuerdo de conformidad. Finalmente, el hombre ha aceptado una condena de un año y medio de cárcel al apreciarse la atenuante de dilaciones indebidas.