Semana negra: El hombre que no sabía cumplir el alejamiento

El peligroso socavón y el ingenio policial en el Camí d’Alcanada.

El peligroso socavón y el ingenio policial en el Camí d’Alcanada. / Policía Local d'Alcúdia

Lorenzo Marina

Lorenzo Marina

Un hombre al que el juez le había impuesto una orden de alejamiento de 200 metros de su expareja mostró una particular interpretación de la medida cautelar. El sujeto contabilizaba el recorrido que realizaba para distanciarse de la denunciante, aunque eso no le alejara demasiado de ella en línea recta. Cuando la denunciante se percató de la presencia de él en las inmediaciones de su domicilio, no tuvo reparos en avisar a la Policía para hacer constar que este individuo habría incurrido en un presunto delito de quebrantamiento de orden judicial. Sin embargo, al ser llevado ante el juez sus explicaciones despertaron la hilaridad generalizada. Hasta el punto de que este sujeto trasladó su absoluta convicción de que estaba cumpliendo escrupulosamente el mandamiento judicial. «¿El alejamiento atraviesa edificios?», preguntó con evidente ingenuidad. A continuación los presentes le tuvieron que explicar, en un alarde de infinita paciencia, que el alejamiento se computaba en línea recta desde el domicilio de la denunciante. Independientemente del recorrido que él hiciera. En definitiva, el denunciado había vulnerado la distancia impuesta sobre su expareja en 40 metros. El juez tiene que dirimir si el incumplimiento de la orden judicial es intencionado o fruto de un despiste con tintes surrealistas.

Un enorme socavón en el asfalto en mitad de la carretera

Un socavón de grandes dimensiones apareció de manera sorpresiva el pasado lunes en la carretera del Camí d’Alcanada. El asfalto había cedido hasta el punto de acercarse por este tramo representaba un serio peligro. Los agentes de la Policía Local de Alcúdia tuvieron que agudizar el ingenio. La premisa era mantener la circulación en este punto tratando de minimizar el riesgo a toda costa. Finalmente lo lograron. Para ello los policías colocaron numerosos conos para permitir el tráfico en ambos sentidos. Para alertar de la presencia del enorme socavón colocaron la cinta policial. Evidentemente esto se trató de algo provisional. La verdadera solución pasa por asfaltar convenientemente este tramo. La presencia de este agujero supone un serio riesgo para los vehículos y máximo para un motorista que acierte a pasar por el lugar. 

Casi parálisis en los juzgados en una semana festiva intermitente

La anómala semana de fiestas intermitentes redujo la actividad judicial a la mínima expresión. Los juicios programados eran la excepción en una semana en la que había que sortear la celebración de la Constitución y la Inmaculada Concepción. No obstante algunas vistas aisladas salpicaron la semana y, por supuesto, el juzgado de guardia se mantuvo a pleno rendimiento. 

Sentado junto la puerta en el interior de Vía Alemania

El comportamiento de un individuo que se encontraba en el interior de los juzgados de Vía Alemania puso a prueba la paciencia del personal de seguridad y de los agentes de la Policía Nacional que realizan las conducciones de detenidos. Este sujeto se sentó en el suelo junto a la puerta y no hacía el menor ademán de moverse. El vigilante le dijo con exquisita amabilidad que no podía permanecer allí. Pese a la advertencia, hizo caso omiso. Finalmente tuvieron que llegar tres agentes de la Policía Nacional. Estos le dijeron que de no marcharse incurriría en un delito de desobediencia y sería detenido. Entonces se apresuró a ponerse en pie y marcharse.