Un acusado de al menos cuatro robos con fuerza en domicilios de Palma y de vender los objetos sustraídos en artículos sustraídos en una tienda de artículos de segunda mano culpó ayer a su hermano de cometer todos los delitos. De hecho su explicación fue tan convincente que el fiscal y las demás partes pidieron que la causa fuera devuelta al juez instructor para investigar los hechos.
Así, durante el juicio celebrado en la mañana de ayer en el Juzgado de lo Penal número seis de Palma, un joven se sentó en el banquillo de los acusados por, presuntamente, robar en al menos cuatro domicilios de Palma. El fiscal pedía inicialmente cinco años de prisión para él.
«Mi hermano me obligó a venderlos», replicó el procesado a las preguntas del ministerio público. «No me dejaba salir de noche», prosiguió. A tenor de su explicación, las partes pidieron que la causa se devolviera al Juzgado de Instrucción que la inició.
