La tasa de criminalidad en Baleares se sitúa en un 57,7 delitos por cada mil habitantes. Estos son los datos estadísticos del segundo trimestre de este año, que han sido publicados esta mañana por el Ministerio del Interior. Según esta estadística, el porcentaje de delincuencia ha aumentado en las islas con respecto a otros años donde hubo la misma actividad turística
Así, entre enero y junio en el archipiélago se contabilizaron 33.541 infracciones penales. En estos seis meses el porcentaje de casos resueltos es muy similar al de los años anteriores. En este periodo se ha detenido a 223 personas. Cuatro de cada diez casos han sido resueltos.
Por tipología delictiva, la mayoría de casos se refieren a hurtos. En seis meses se han contabilizado 9.922 casos, aumentando los hurtos con respecto al mismo periodo del año pasado, que se produjeron 5.950 delitos.
En cambio, otros delitos han descendido. Un ejemplo sería los homicidios o asesinatos, con una reducción del 75%. También bajan los casos de tentativa de homicidio o intento de secuestro.
Otro de los delitos que baja algo más de un 50 por ciento son los robos en las explotaciones agrícolas o ganaderas de Baleares.
No pasa lo mismo con los robos en coches, el tráfico de drogas o los asaltos de violencia, que en seis meses han aumentado el número de delitos.
Según los datos del Ministerio del Interior, en términos generales Baleares ha aumentado su volumen de delitos en un 24% en comparación con los seis primeros meses del año pasado. A pesar de ello, la Delegación del Gobierno interpreta que la tasa de criminalidad en las islas (57,7) es una de la más baja de los últimos años, con excepción de los periodos de la pandemia. En el año 2019, por ejemplo, la tasa de criminalidad se situaba en el 67.6 puntos.
Esta tasa de Baleares se sitúa por encima de la media nacional, que es de 46,2 delitos o faltas por cada mil habitantes. Por tanto, las islas, junto a la comunidad de Madrid, encabeza las comunidades con un nivel delictivo más alto. Sin embargo, desde la Delegación del Gobierno se señala que Baleares se ha situado históricamente en la primera posición de este indicador estadístico, ya que la tasa se calcula sobre la población censada, sin tener en cuenta el número de turistas que visitan cada año las islas como destino turístico.
Por islas, el indicador más alto de la tasa de delitos se sitúa en Ibiza, con un 66,7. Le sigue Mallorca, con 58.2, Formentera, con 49.5, y por último se sitúa Menorca con 39.5.
La localidad más problemática sigue siendo Palma, donde la tasa de criminalidad se sitúa en el 73,3 por cada mil habitantes. En esta ciudad el número de delitos ha aumentado un 27% en estos primeros seis meses. Aún así, el indicador es algo inferior al que reflejaron los datos de delincuencia de los años 2019 y 2018.
