Un total de siete jóvenes se sentaron ayer en el banquillo de los acusados del Juzgado de lo Penal número 2 de Palma por una oleada de robos en el interior de viviendas habitadas en la ciudad. Los procesados aceptaron penas de dos años de prisión por estos delitos. Además, dos de estos encausados fueron condenados también por un robo con violencia a dos años y cuatro meses de cárcel.

Antes de la celebración de la vista, las partes alcanzaron un acuerdo de conformidad. No obstante el retraso de uno de los procesados, al quedarse dormido, estuvo a punto de dar al traste con el pacto. El fiscal apreció la atenuante muy cualificada de reparación del daño, ya que habían consignado más de 3.000 euros de responsabilidad civil antes del juicio. También aplicó la atenuante de toxifrenia a los autores del atraco por su adicción a la droga en el momento de cometer el delito.

Los robos se llevaron a cabo entre septiembre y octubre de 2021 en distintos inmuebles de Palma. Los siete acusados se reunían en una antigua oficina bancaria okupada de la avenida Comte de Sallent de Palma. Allí se repartían el botín. Así, sobre la una de la madrugada del 18 de septiembre los ladrones escalaron al segundo piso de una vivienda del barrio de sa Calatrava. Los acusados robaron ordenadores a un matrimonio alemán mientras dormía. A las tres de la madrugada del 24 de septiembre, los ladrones entraron en una vivienda del caso antiguo de Palma y robaron un patinete y documentación a una pareja mientras dormía. Otro tanto ocurrió la madrugada del 1 de octubre en sa Calatrava. Dos de ellos, además, asaltaron y golpearon a un joven en la calle para robarle la cartera.