La Guardia Civil dice que el sargento realizó el disparo mortal al legionario mallorquín

Expertos en balística del instituto armado declararon ayer ante el Tribunal Militar de Sevilla, que juzga la causa

El legionario mallorquín Alejandro Jiménez Cruz.

El legionario mallorquín Alejandro Jiménez Cruz. / D.M.

Lorenzo Marina

Lorenzo Marina

Tres peritos expertos en balística de la Guardia Civil han coincidido este miércoles en señalar al sargento como el autor del disparo que causó la muerte al legionario mallorquín Alejandro Jiménez Cruz, el 25 de marzo de 2019, durante una maniobras en el cuartel alicantino de Agost. Los especialistas también han salido al paso por completo de la hipótesis de un supuesto rebote de la bala, sostenido por la defensa de los encausados. De hecho lo han descritocomo un disparo directo al pecho.

Durante su comparecencia en el juicio, los expertos en balística de la Guardia Civil han explicado que habían examinado en el laboratorio los 15 fusiles de asalto HK, que se utilizaron en las maniobras en el momento en el que se produjo la muerte del legionario mallorquín. Después de disparar con todos ellos y compararlo con el proyectil hallado en el cuerpo de Alejandro Jiménez Cruz todos llegaron a una misma conclusión: el disparo se efectuó con el arma del sargento.

Los expertos de la Guardia Civil han sustentado su apreciación en las estrías encontradas en la bala que mató a la víctima, al cotejarlas con las del cañón del fusil de asalto del suboficial. Este análisis, a su juicio, no ofrecía ningún género de dudas. Los especialistas también han hecho hincapié en que se habían analizado en su estudio una serie de variables como la trayectoria, la distancia, la acústica o la química antes de alcanzar estas conclusiones.

A 15 metros de distancia

En este sentido, los peritos del instituto armado han precisado que el disparo con el fusil de asalto, que mató al legionario mallorquín, se habría efectuado a unos 15 metros de distancia. También han indicado que el sargento iba andando al tiempo que iba disparando. Por este motivo. hasta siete proyectiles del arma del suboficial se hallaron en ese punto.

Al término de la vista, Juan José Jiménez, padre del militar mallorquín fallecido, ha expresado su satisfacción. «Los peritos de la Guardia Civil han dicho, con un cien por cien de seguridad, lo que nosotros sabíamos desde un principio, que el disparo que mató a mi hijo lo hizo el sargento. El principal testigo de lo que había pasado era el proyectil que llevaba Alejandro en el cuerpo», ha subrayado.