Caso Abierto - Diario de Mallorca

Caso Abierto - Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Piden ocho años de cárcel a un hombre por provocar dos incendios en la Serra de Tramuntana

El acusado, un ciudadano de origen alemán, también ocasionó importantes daños en un vehículo de la conselleria de Media Ambiente

Iniciaba el incendio con pastillas de barbacoa

Ocho años de prisión es la condena que solicita la fiscalía de Balears contra un individuo, que la próxima semana será juzgado por provocar intencionadamente dos incendios forestales en la Serra de Tramuntana. El acusado se encuentra en estos momentos en libertad, después de permanecer ocho meses preso preventivo.

Los hechos que se le atribuyen a este acusado de 49 años, de origen alemán, ocurrieron en el mes de agosto del año 2019 en la localidad de Esporles. El día 18 de ese mes el hombre, según la versión de la fiscalía, se dirigió a un párking público de la localidad, donde se encontraba estacionado un vehículo de la conselleria de Medi Ambient. Llevaba encima varias pastillas para encender barbacoas y las utilizó para prender las dos ruedas delanteras del vehículo todoterreno de la Conselleria. A continuación perforó con un objeto punzante los neumáticos traseros del vehículo. El coche sufrió daños muy graves.

Al día siguiente de madrugada, según el relato de la acusación, el presunto pirómano se dirigió a un terreno rústico protegido de Esporles, ubicado en la Serra de Tramuntana. Con las mismas pastillas de encendido provocó tres incendios a la vez, con una cierta distancia entre estos focos, provocando que el fuego se extendiera con rapidez. Los bomberos del Consell de Mallorca tuvieron que desplegar todos sus medios para controlar las llamas. Las tareas para sofocar el fuego fueron muy complicadas. Los focos no se sofocaron hasta primera hora de la tarde del día siguiente. El perímetro afectado por las llamas superó los 7.000 metros, afectando a un terreno protegido.

El individuo no tardó mucho tiempo en volver a actuar. Cinco días más tarde, también de madrugada, repitió los mismos hechos en otra finca, ubicada también en el término municipal de Esporles. Volvió a utilizar las pastillas de barbacoa, que las incendió en tres focos distintos, para que el fuego se extendiera con más facilidad.

Esta finca también pertenece al parque natural de sa Tramuntana, con la diferencia de que en esta ocasión el terreno se encuentra ubicado en una zona donde hay varias viviendas. Por lo tanto, el fuego, sino se hubiera controlado con los medios aéreos y terrestres, posiblemente hubiera alcanzado las viviendas. Al final no fue así, porque la conselleria de Medi Ambient movilizó a todos los medios que tenía para sofocar las llamas. Además de los medios aéreos, tuvieron que intervenir 40 agentes forestales, porque las llamas no fueron fáciles de sofocar. 

Estos incendios forestales provocados en tan poco espacio de tiempo hizo que se sospechara que no se trataba de siniestros fortuitos, sino que debían estar relacionados entre si. Era lógico que se sospechara que estaba actuando un pirómano y se hacía preciso su detención, para evitar que pudiera provocar otros siniestros forestales.

La Policía Local realizó una vigilancia en varias zonas forestales de la localidad. Este servicio dio sus frutos. Dos días después del último incendio se localizó al sospechoso. Se encontraba en un área boscosa y parecía que estaba dispuesto a provocar su tercer incendio forestal. El hecho de que llevara encima varias pastillas para encender barbacoas era la prueba que le delataba.

El individuo se mostró muy violento en el momento de su arresto. No tenía ningún antecedente policial por hechos graves, pero era conocido porque había protagonizado algún incidente en los bares de la localidad de Banyalbufar. 

La fiscalía también le reclama una indemnización económica.

Compartir el artículo

stats