La Policía Nacional ha detenido a un hombre de unos 30 años y nacionalidad marroquí acusado de violar presuntamente a un menor de edadde 17 años y con una discapacidad mental del 49%, tras seguirlo a la salida del metro después de que se bajara en una parada de Torrent (Valencia). Un juzgado ya ha acordado su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, aunque se inhibirá a favor del juzgado competente de Torrent, al haberse producido el delito en su demarcación judicial.

Los hechos se produjeron el pasado 29 de agosto por la tarde cuando el joven de 17 años subió al metro en la parada de Ángel Guimerá de València. Al mismo tiempo que él subieron dos hombres, según se observa en las cámaras de videovigilancia con las que cuenta la estación, que fueron revisadas por la policía para poder identificar al autor de la agresión sexual.

A la altura de la parada de Torrent, tanto la víctima como uno de estos dos hombres que habían subido al mismo tiempo que él se apean del transporte público. Según ha podido saber este periódico, el presunto agresor logra llevarse a su víctima mediante engaños, aprovechándose presuntamente de su discapacidad mental, hasta unos coches estacionados, donde le obliga a hacerle una felación. Posteriormente también le habría violado analmente, sin que nadie se percatara de lo que estaba ocurriendo, al encontrarse oculto entre dos vehículos.

La víctima relata en su denuncia que se quedó parado y no gritó "por miedo". Tras culminar la agresión sexual, y dejar vestigios biológicos de su delito, el presunto violador se marchó hasta que finalmente ha sido identificado y detenido por la policía.

Ha sido clave en dicha identificación las grabaciones de las cámaras de seguridad del metro, en las que se observa claramente al sospechoso, así como la posterior identificación vía fotográfica por parte de la víctima. Una vez plenamente identificado los investigadores de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional tramitaron una requisitoria contra él, al encontrarse en paradero desconocido.

La semana pasada, tras acudir a un servicio por una reyerta en el valenciano barrio de Campanar, una patrulla identificó al presunto violador y comprobó que tenía una orden de detención contra él en vigor por un delito de agresión sexual.

El arrestado, de unos 30 años y con antecedentes, se acogió a su derecho a no declarar tanto en dependencias policiales como posteriormente en el juzgado de guardia. El Juzgado de Instrucción número uno de València acordó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin posibilidad de fianza por el delito de agresión sexual agravada por haber acceso carnal y por tratarse de una víctima especialmente vulnerable por su discapacidad.