La abogada de la acusación particular en el caso de la muerte de Manuela Chavero, Verónica Guerrero, ha asegurado este lunes que no tiene la menor duda que "habrá un jurado popular", tal y como solicitaron, por la naturaleza de los delitos. Aunque todavía no es seguro, porque la defensa ha recurrido que las diligencias previas se transformen en tribunal de jurado.

Esta martes en Zafra se ha celebrado la primera comparecencia en la que se le han expuesto al investigado, Eugenio Delgado, las acciones delictivas por las que va a ir a ese tribunal de jurado. De este modo, cada una de las partes ha puesto sobre la mesa cuál es su parecer jurídico, las diligencias que ya se han practicado y las pruebas que se deben practicar para seguir con la investigación. Posteriormente, la jueza determinará si se abre el juicio y si se pasa a otra fase procesal.

Respecto a lo que ocurrió aquella noche del 5 de julio de 2016 en Monesterio, la abogada de la familia ha aseverado que tienen "clarísimo", y así lo han dicho desde el principio, que "la motivación de este crimen se corresponde con un móvil sexual". En este sentido, ha afirmado que es "un asesinato subsiguiente a un delito contrario a la libertad sexual, una detención ilegal y luego unas lesiones psíquicas y de integridad moral contra la hermana de la víctima, Emilia, y los padres".

A su juicio, hay hechos "suficientemente fundamentados" para esa acusación de delito de agresión sexual, aunque no ha podido entrar en detalles. "Hay motivos e indicios más que serios y pruebas sólidas, científicas y objetivas, para pensar que confluyen los delitos que he dicho y que así lo hemos expuesto en el tribunal", ha agregado a los medios.

También ha manifestado que lo que intentan, desde el principio, es que quede claro que los delitos son esos y que, en ningún caso, ninguna de las acusaciones va a admitir que los hechos sean constitutivos de algún delito menor.

Por su parte, el abogado de la defensa, José Antonio Carrasco, ha confirmado que ellos mantienen desde un principio que se trató de una muerte accidental, por un golpe en la nuca. Respecto a la acusación de delito contra la libertad sexual, ha señalado que lo cierto es que en el procedimiento no hay ningún indicio racional con base científica de que hubiera sucedido eso. "Podemos defendernos si se ha acabado con la vida de esa persona o no, pero, evidentemente, un delito de esa naturaleza es que no hay ni siquiera el más mínimo indicio ni base científica, y hay varios informes científicos de acusaciones, del instituto de medicina legal y de defensa que ninguno apunta a ello", ha recalcado.

Sobre cuál es la situación de Delgado, ha detallado que se encuentra «muy tranquilo», que mantiene su versión y que está en prisión provisional desde el 20 de septiembre de 2020.