Dos jóvenes y un menor desplegaron una actividad delictiva frenética en Mallorca durante la pasada noche de Halloween. Los delincuentes perpetraron entonces tres atracos en distintos puntos de la isla. Cada uno de los adultos procesados aceptó ayer, durante el juicio celebrado en el Juzgado de lo Penal número 4 de Palma, una pena de tres años de prisión, que quedó en suspenso si no delinquen en los próximos tres años.
Los hechos que se enjuiciaron ayer se iniciaron sobre las tres y media de la madrugada de la pasada noche de Halloween en Santa Maria del Camí. Cuando una joven estaba en la avenida Central del municipio con otras dos amigas, la ahora condenada, junto con una menor, le arrebató el móvil de las manos de manera sorpresiva. La víctima fue tras ellas.
Al darles alcance, la delincuente se revolvió y esgrimió una botella de cristal de forma amenazante. «O me das dinero o te pego con la botella en la cabeza», le espetó. La afectada se amedrentó y accedió a hacerle una transferencia de 100 euros por Bizum.
Cuando la víctima intentó recuperar el teléfono, fue golpeada. La acusada le propinó un puñetazo en la cara. Las gafas se le cayeron y se le rompieron. La asaltante le instó a que le hiciera una segunda transferencia Bizum si quería recuperar el terminal. La afectada accedió de nuevo.
Mientras tanto, el chico contuvo a las amigas de la víctima para impedir que se acercaran. A continuación instó a la asaltante a que destruyera el teléfono móvil. Así lo hizo de inmediato.
El siguiente destino de los asaltantes fue Pòrtol. Sobre las cuatro de la madrugada, los asaltantes abordaron a dos chicas que se acababan de bajar de un taxi en el Camí de na Clesa. La procesada y la menor atracaron a las dos víctimas. A una de ellas, la encausada le propinó varios puñetazos en la cara. Sin embargo esta logró huir. Le causaron desperfectos en la ropa por valor de 110 euros. Los tres asaltantes huyeron en un coche.
El siguiente escenario elegido media hora después para perpetrar un nuevo asalto fue Palmanova. La víctima era una menor de edad. El conductor del coche paró el vehículo al llegar a su altura en el Passeig del Mar. La joven y la menor se apearon del turismo y le requirieron el móvil. Ante el temor a sufrir una agresión, la víctima se lo entregó. Los delincuentes huyeron con el terminal. Los investigadores de la Guardia Civil del Pont d’Inca los detuvieron el 24 de noviembre del pasado año.
Acuerdo de conformidad
Con carácter previo a la celebración del juicio en Vía Alemania, las distintas partes alcanzaron un acuerdo de conformidad para ver rebajados las penas a cambio de reconocer los delitos.
Asimismo, la acusada consignó en el Juzgado de 2.500 euros y el procesado 3.000 euros para indemnizar a las víctimas. Este hecho fue apreciado como una atenuante muy cualificada de reparación del daño.
Tras aceptar cada uno una pena de tres años de prisión, la pena quedó en suspenso si no delinquían en ese periodo de tiempo. Tampoco se podrán acercar a menos de 500 metros de las víctimas y deberán pagar una multa de 1.440 euros cada uno.
