Tres locales de los barrios palmesanos de Son Gotleu, Gomila y entre el Parc de ses Estacions y la Plaza Fleming ocultaban fumaderos clandestinos de marihuana en su interior. La Policía Nacional, en colaboración con la Policía Local, han desmantelado estos establecimientos y ha detenido a sus responsables por un presunto delito contra la salud pública.

La investigación policial se inició a raíz de decenas de denuncias vecinales y de comerciantes de estos barrios de Palma. Estas personas hicieron constar la existencia de estos activos puntos de venta y consumo de drogas en distintos puntos de la capital balear. Personas ajenas al barrio deambulaban por la calle bajo los efectos de los estupefacientes y se había incrementado la sensación de inseguridad en el vecindario.

Agentes del Grupo II de Estupefacientes de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Policía Nacional abrieron una investigación para esclarecer lo ocurrido. En primer lugar elaboraron un mapa con las zonas de Palma donde se habían concentrado las quejas. Fruto de estas pesquisas, los investigadores localizaron tres locales sospechosos en dichos barrios palmesanos.

La investigación determinó que tres individuos -un italiano, un uruguayo y un español- habían instalado esta suerte de 'narcosalas' en sus respectivos locales. La afluencia de personas para drogarse habían causado estragos en los barrios. Estos individuos acudían allí a cualquier hora del día tanto para comprar droga como para consumirla en el interior.

Tras interceptar a compradores e intervenirles la sustancia estupefaciente y solicitar la orden judicial de registro, los agentes de la Policía Nacional y la Policía Local efectuaron tres entradas y registros en estos tres locales.

En uno de estos locales, los agentes encontraron a más de treinta consumidores en apenas tres horas. En un establecimiento un individuo se resistía a entregar la droga a los policías. Su grado de intoxicación era tal por el consumo de estupefacientes que era incapaz de distinguir y reconocer la placa policial.

En dos semanas, los efectivos policiales irrumpieron en dichos establecimientos. Los responsables fueron detenidos y se intervino diversa cantidad de sustancia estupefaciente, mayormente marihuana. También se incautaron de dinero fraccionado y diversos útiles para pesar y dosificar las drogas. El peso de la droga intervenida supera los dos kilos y se han hallado más de 2.000 euros en billetes. También se han encontrado diversas armas blancas que han sido destruidas.

Por su parte, agentes de la Patrulla Verde de la Policía Local levantaron las correspondientes actas por incumplimiento de la licencia y de la ordenanza municipal. La actuación conjunta de estos funcionarios con la Policía Nacional permite desmantelar los establecimientos donde se favorece el consumo de droga.