La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma juzgó ayer a un hombre de 62 años acusado de abusar sexualmente de su nieto en 2017 en su domicilio en Artà. En un principio, la Fiscalía pedía para él seis años de prisión, pero solicitó que se incluya en el escrito la atenuante de dilación indebida, por lo que finalmente la petición de pena se redujo a cuatro años y 11 meses.

Durante el juicio se proyectó como prueba la declaración que entonces hizo el menor, en la que afirmaba que el acusado le tocó las partes íntimas. «Le dije que parara y él me dijo que no, seguía y seguía hasta que me fui a dormir», apuntó.

La madre de la víctima aseguró que el acusado le reconoció los hechos «poniéndose a llorar y diciendo que era un juego». Sin embargo, el procesado negó durante su intervención haber abusado de su nieto. «No sé por qué el niño dice esto. Siempre he tenido buena relación con ellos», indicó.