Magaluf registró en la madrugada del pasado día 12 un altercado multitudinario, en el que media docena de policías locales las pasaron canutas para controlar a una veintena de jóvenes muy agresivos, que al parecer trataban de evitar la detención de unos implicados en una pelea previa. Los agentes tuvieron que separar a los contendientes, que delante de ellos volvieron a enfrentarse a golpes. Al mismo tiempo varios de ellos tuvieron que dispersar con porras extensibles a los amigos de los arrestados, que intentaban impedir que se los llevaran.
El altercado ocurrió, según confirman fuentes policiales, a las cuatro de la madrugada del pasado sábado 12, frente a un conocido pub ubicado en el Camí de sa Porrassa, en Magaluf. Al parecer se produjo una pelea entre dos grupos de jóvenes y varias dotaciones de la Policía Local acudieron al lugar.
Los agentes arrestaron al menos a varios jóvenes. Un vídeo grabado por uno de los implicados muestra a uno de los implicados, sentado en el suelo y rodeado por tres agentes que tratan de impedir que nadie se acerque. El chico grita: ¡Me han pegado!».
Los ánimos están muy encendidos y un policía trata de calmarlos. «Se está liando, no os quedéis por aquí porque se va a volver a liar», se le oye decir a los jóvenes que le rodean.
En ese momento les alertan: «¡Mira, pelea!». A poca distancia varias personas se están liando a golpes. Varios policías se dirigen hacia allí para tratar de separar a los contendientes, pero los jóvenes se vuelven contra ellos. Los agentes reciben empujones mientras tratan de separar a los chicos y se llevan a uno de ellos detenido. La situación va a peor cuando tratan de meter al detenido en el furgón policial. «¡Sacadlo, sacadlo», gritan. Los jóvenes se enfrentan abiertamente a los agentes, que reciben nuevos empujones. Uno de los policías saca una porra extensible y golpea con ella a los chicos para tratar de dispersarlos, todo mientras uno de ellos continúa grabando.
El follón se traslada entonces a la acera de enfrente, donde un policía está tratando de inmovilizar en el suelo a otro detenido. Varios jóvenes se abalanzan contra él para impedirlo. De nuevo se repiten los empujones y los golpes de porra. El incidente finalizó con al menos dos de los implicados detenidos.
