Ocho personas, cinco de ellas jóvenes y tres menores de edad, fueron detenidas ayer por la Policía Nacional en Jaca (Huesca) como supuestas autoras de la paliza recibida por un militar fuera de servicio, el domingo 2 de octubre, en la céntrica plaza de Biscós.

Los menores de edad han sido puestos a disposición de la Fiscalía especializada en delitos cometidos por personas que no han alcanzado la mayoría de edad, mientras que el resto de arrestados ha pasado esta mañana, a las 10.30, ante el juzgado de instrucción de Jaca en funciones de guardia.

A todos los detenidos se les imputa un delito de lesiones. El agredido, que fue trasladado a un centro sanitario, recibió asistencia médica y ya recibió el alta.

En la detención de los presuntos autores de la agresión se han utilizado testimonios y grabaciones de locales próximos del entorno de la plaza de Biscós. Se investigan las circunstancias en las que se produjo la agresión, que se produjo en torno a las cuatro de la madrugada, tras el cierre de los bares.

Al parecer, los agresores procedían de una cercana zona de bares donde es posible que, antes de la agresión, hubieran protagonizado un incidente con la víctima. Varios de ellos se abalanzaron sobre el soldado, le dieron puñetazos con gran violencia y lo zarandearon hasta tirarlo al suelo, donde otros le golpearon y le dieron dos patadas, como muestran las imágenes captadas.

Reciente agresión en Huesca

No es la primera vez que un militar es víctima de una agresión en la provincia de Huesca en las últimas fechas. .A principios del pasado mes de septiembre una joven que se sentía acosada por una grupo de jóvenes en Huesca fue auxiliada por un militar de 27 años que a su vez fue agredido y terminó en la uci del hospital Clínico de Zaragoza.

Un joven de los que supuestamente acosaban a la chica le dio un puñetazo que le hizo caer y le provocó un grave traumatismo craneal . Tres jóvenes oscenses fueron detenidos por la Policía Nacional.

Todo ocurrió sobre de madrugada en la plaza de Nuestra Señora de Salas, lugar al que se trasladaron varias patrullas policiales que vieron a un joven tendido inconsciente en el suelo. Una persona que estaba junto a él les explicó que «los agresores habían sido unos seis o siete jóvenes que se habían marchado corriendo por el pasaje de Salas». Inmediatamente la Policía estableció un dispositivo de búsqueda y una patrulla localizó a los posibles autores.

Los agentes se bajaron de sus vehículos al tiempo que solicitaron a esas ocho personas la documentación. Dado el numeroso grupo de sospechosos también pidieron apoyo del resto de efectivos policiales. Uno de los jóvenes llevaba una camiseta blanca con manchas de sangre.

De forma sorpresiva, los jóvenes rodearon a los agentes, les agarraron por los brazos hasta el punto que llegaron a lanzarles golpes y zarandearles para evitar que se acercaran al que llevaba restos de sangre en su ropa. En ese momento llegó un coche patrulla y todos se marcharon rápidamente y se dispersaron.

La investigación policial permitió identificar, localizar y detener a tres de ellos, J, G. V., R. G. T., y S. G. G. Uno de ellos es el autor principal de la agresión.