Un hombre aceptó ayer una condena de dos años de prisión, que queda suspendida, por atacar con salfumán a una mujer en Palma. La víctima sufrió diversas quemaduras en la cara y lesiones oculares, pero no le han quedado secuelas. El procesado, de 67 años y con antecedentes por violencia machista, deberá indemnizarla con 1.025 euros. La magistrada dictó sentencia en el acto tras el acuerdo alcanzado entre la fiscal y al abogado defensor, Bartolomé Salas.

Los hechos ocurrieron hacia las tres de la tarde del 2 de octubre de 2020 en la plaza Drassana. El hombre se acercó a la víctima con una botella de salfumán, la agarró por el brazo y le dijo: «¡Te tengo que ver muerta!». Acto seguido, arrojó el ácido sobre la cara de la mujer y huyó del lugar.

A consecuencia de la agresión, la perjudicada sufrió quemaduras y diversas lesiones oculares, entre ellas una inflamación de la córnea. Tuvo que ser atendida en un centro médico y someterse a una tratamiento oftalmológico, que incluyó la oclusión del ojo, una pomada antibiótica, lágrimas artificiales y analgésicos para el dolor. Tardó algo más de tres semanas en recuperarse y no le ha quedado ninguna secuela.

La mujer presentó una denuncia ante la Policía Nacional, que abrió una investigación y detuvo al sospechoso. Acusado y víctima explicaron que se conocían, pero dieron versiones opuestas sobre qué tipo de relación mantenían.

La fiscalía solicitaba inicialmente cuatro años y tres meses de cárcel para el acusado por un delito de lesiones con instrumento peligroso. Sin embargo, ayer rebajó su petición a dos años de prisión tras el pacto de conformidad alcanzado. La sentencia incluye una orden de alejamiento de cinco años de la víctima.