Delincuentes con su residencia fijada en los barrios palmesanos de Son Gotleu y de La Soledat hacen una caminata casi diaria a la playa de Can Pere Antoni. Su momento predilecto para acudir allí es al caer la noche o ya de madrugada. Su objetivo son los teléfonos móviles y otros efectos de valor que muchos turistas dejan en la arena cuando se dan un baño de noche.
Estos malhechores, en su mayoría jóvenes de origen argelino, suelen residir como okupas en estos dos barrios palmesanos. En lugar de desplazarse hasta la Playa de Palma, muchos de estos ladrones han preferido este daño acudir a Can Pere Antoni, ya que pueden realizar el trayecto andando.
La mayoría de estos delincuentes prefieren realizar el hurto al descuido. Cuando los bañistas han dejado sus pertenencias desatendidas, las sustraen sin que se den cuenta. Sin embargo, en algunas ocasiones, al ser descubiertos, no descartan emplear la violencia contra sus legítimos propietarios.
Durante el presente año, la Policía Nacional ha registrado en Can Pere Antoni casi una decena de delitos en esta céntrica playa. De estos, media docena eran robos con violencia a los turistas. Mientras, unos tres eran hurtos al descuido. Todos estos delincuentes han sido sorprendidos in fraganti.
Un dispositivo policial se ha establecido este verano en esta zona. Por un lado, policías uniformados patrullan la zona con cierta frecuencia. Su presencia en Can Pere Antoni tiene un inequívoco carácter disuasorio. Buena prueba de ello es que muchos de los delincuentes cesan su actividad y guardan las formas hasta que han pasado de largo.
Paralelamente, a pie playa, otros agentes de paisano pasan completamente desapercibidos como si de otros turistas más se tratara. Su función primordial consiste en estar ojo avizor en todo momento a los movimientos de los delincuentes de una manera disimulada, sin despertar sospechas.
La labor de estos policías durante la presente campaña estival ha sido determinante para sorprender in fraganti a muchos de estos delincuentes. De hecho, cuando algunos de estos ladrones creían actuar con total impunidad se han visto detenidos por estos agentes en bañador, que les han mostrado la placa antes de proceder a su arresto.
Recomendaciones
Estas actuaciones de la Policía Nacional en Can Pere Antoni también se han visto complementadas con apoyo de la Policía Local de Palma. La ubicación céntrica de esta playa la han convertido en un suculento objetivo sin necesidad de tener que desplazarse a la Playa de Palma. Los agentes municipales también han puesto en marcha esta combinación de agentes uniformados y de paisano en este punto.
Los delincuentes persiguen arrebatar a los turistas todo tipo de efectos que puedan dar una rápida salida en el mercado negro. Entre todas las pertenencias, los teléfonos móviles suele ser el objeto más preciado. No obstante, la sustracción de los terminales de gama alta, de más de 400 euros, constituye un delito. Tener disponible el número IMEI del terminal puede contribuir a su rápida recuperación. Mantener los efectos personales a la vista en todo momento suele ser l a mejor forma de evitar sorpresas desagradables como un robo al descuido o con violencia.
