La jueza del Juzgado de Instrucción número 2 de Ibiza, que se encontraba en funciones de guardia, decretó ayer la libertad provisional sin fianza para los dos detenidos en relación a la agresión sexual múltiple que tuvo lugar la noche entre el pasado 21 y 22 de julio a una joven de 19 años, de origen leonés y residente en Mallorca, en Formentera. Como medidas cautelares, dictó la obligatoriedad de comparecer periódicamente en la sede judicial, la prohibición de abandonar Ibiza y Formentera y la retirada del pasaporte.
A primera hora de la mañana de ayer, sobre las nueve y media, la Guardia Civil trasladó a los dos detenidos, de 32 y 37 años y de nacionalidad marroquí, para su puesta a disposición judicial.
La comparecencia se prolongó durante casi nueve horas. Finalmente, la jueza decretó la libertad provisional para los dos detenidos con las medidas cautelares de retirada del pasaporte, prohibición de salir de las pitiüses y la obligación de presentarse periódicamente en el juzgado. Al parecer, la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Ibiza dictó estas medidas en lugar de la prisión «ante la falta de pruebas fehacientes», según fuentes jurídicas. Un tercer implicado, también de nacionalidad marroquí, se encuentra huido en su país. La jueza dictó una orden de busca y captura contra él.
La víctima de 19 años, residente en Mallorca, había estado trabajando en Formentera. Al acabar su contrato laboral, decidió quedarse unos días de vacaciones en la isla. Según su relato, los tres agresores, a los que no conocía de nada, la retuvieron durante 14 horas en una casa derruida de Sant Ferran. Durante todo este tiempo la sometieron a todo tipo de torturas y vejaciones sexuales.
De acuerdo con el testimonio de la denunciante, entre el 21 y el 22 de julio fue violada en repetidas ocasiones. También la quemaron apagándole cigarrillos en la piel y acercándole cucharillas incandescentes.
Cocaína y crack
Asimismo, los tres violadores le habrían administrado cocaína y crack para anular su voluntad y que no pudiera oponer resistencia a las agresiones sexuales. Una semana después, cuando la joven regresó a Palma, la chica interpuso una denuncia en una comisaría de la capital balear, su lugar de residencia.
La investigación fue traspasada a la Guardia Civil. Agentes de la Policía Judicial del instituto armado se encargaron de las pesquisas y estas culminaron el pasado viernes con la detención de los dos presuntos violadores, de 32 y de 37 años. Un tercer implicado en la violación grupal a la joven se habría dado a la fuga a su país de origen, Marruecos.
Entre 9 meses y un año
Fuentes judiciales informan de que son «muy pocos» los casos en los que el juez dictamina prisión provisional directa en casos de agresiones sexuales, por lo que la puesta en libertad condicional de los acusados no supone un hecho «excepcional». La comparecencia diaria ante la Justicia, así como la retirada del pasaporte y la prohibición de abandonar las islas, son medidas «suficientes» para evitar la fuga de los supuestos agresores de Formentera, destacaron fuentes oficiales.
A partir de la comparecencia de los imputados ante la Justicia comienza el proceso de instrucción en el que la Policía Judicial de la Guardia Civil, encargada de la investigación del caso, presentará las pruebas pertinentes para tratar de probar la autoría de los imputados sobre la brutal agresión, que fueron reconocidos por la víctima antes de su detención el pasado viernes.
Se espera que en un plazo de «entre nueve meses y un año» los dos hombres se enfrenten al juicio.
Tres hombres violan y torturan a una joven de 19 años
La Guardia Civil detuvo el pasado viernes a dos hombres nacionalidad marroquí por la presunta violación de una joven de 19 años que se encontraba de vacaciones en Formentera tras finalizar su contrato de trabajo en la menor de las Pitiusas. El tercer supuesto agresor se encuentra huido de la Justicia en su país natal, Marruecos, según la Guardia Civil. La joven denunció los hechos una semana más tarde de la brutal agresión, en una comisaría de Palma, pues reside en Mallorca. Según su relato, los agresores la retuvieron durante 14 horas en una casa derruida de Sant Ferran, del 21 al 22 de julio, donde la violaron en repetidas ocasiones, la quemaron con cigarrillos y cucharas incandescentes y la drogaron con cocaína y crack para anular su voluntad. La Policía Judicial investiga el caso.
