Sin que mediara provocación alguna y sin que le conociera de nada, un joven marroquí, de 29 años, rompió un botellín en la cabeza de un cliente de una terraza de Son Gotleu. A continuación, el agresor le clavó los cristales del envase roto a la víctima. La Policía Nacional le ha detenido este lunes por un presunto delito de lesiones. El afectado, por su parte, ha sido trasladado a Son Espases para ser atendido de las numerosas heridas que presentaba. Este mismo sujeto ya protagonizó una agresión similar el pasado 1 de agosto con una botella y amenazó a esta persona con un cuchillo.

Los hechos ocurrieron sobre las siete de la mañana de este lunes en la terraza de un bar de Son Gotleu. Un hombre se encontraba sentado en la terraza de un bar cuando un joven, en estado de embriaguez, le pidió un cigarro a un cliente. Sin mediar palabra, el sujeto cogió un botellín y se lo rompió en la cabeza a la víctima, a la que tampoco conocía de nada.

A continuación, el atacante cogió el botellín roto del cuello y se lo clavó repetidamente al cliente del bar en la parte posterior de la cabeza. El violento ataque inesperado causó a la víctima numerosas heridas por las que sangró abundantemente.

Los testigos de la agresión avisaron al 091 y una patrulla se personó poco después en el establecimiento. Los agentes de la Policía Nacional observaron que tanto el agresor como la víctima tenían la ropa completamente manchada de sangre. El afectado presentaba numerosos cortes, por lo que avisaron a los servicios de emergencia.

Una ambulancia se personó poco después en el lugar. Los facultativos atendieron al herido de los numerosos cortes que presentaba. Dada la gravedad de estas lesiones, el personal sanitario trasladó rápidamente a la víctima a Son Espases para que le hicieran las curas correspondientes. Los agentes de la Policía Nacional, por su parte, detuvieron al agresor por un presunto delito de lesiones.

Se da la circunstancia de que este mismo individuo había protagonizado hechos similares el pasado 1 de agosto en el barrio de Son Gotleu de Palma. Así, sobre las cuatro y cuatro de la tarde de ese día, agentes de la Policía Nacional le detuvieron después de que este sujeto propinara varios puñetazos y agrediera con una botella rota a otro. Como consecuencia de este ataque, la víctima sufrió varios golpes y pequeños cortes en la espalda, en el cuello y en la parte posterior de la cabeza.

La intervención de varios vecinos impidió que la agresión fuera a mayores. De hecho, se llevaron al atacante del lugar. La víctima, entonces, aprovechó para llamar a la Policía. El agresor se percató de su acción y regresó al lugar. Acto seguido, el individuo sacó un cuchillo de grandes dimensiones de la cintura y arremetió contra su objetivo. El hombre se logró zafar de las acometidas que le lanzó con el arma blanca y evitó que le pudiera alcanzar.

Al llegar al lugar, los agentes no encontraron al agresor. No obstante los policías requirieron una ambulancia para que atendiese a la víctima y la llevaran a un centro médico. Los vecinos y testigos señalaron que el atacante estaba muy agresivo y andaba buscando pelea por el barrio. Los agentes le detuvieron entonces, pero quedó en libertad. Nueve días después ha vuelto a las andadas.