Tres embarcaciones de una empresa de alquiler turístico han aparecido rajadas esta mañana en el Port de Sóller. El propietario de las embarcaciones ha presentado una denuncia ante la Guardia Civil por este sabotaje y el instituto armado ha iniciado una investigación para aclarar los hechos. El perjudicado ya sufrió ataques similares en el verano de 2019.

Las tres barcas semirrígidas afectadas presentan importantes cortes, aunque no han llegado a hundirse, según ha explicado el empresario. El hombre ha comunicado lo sucedido a la Guardia Civil, donde ha denunciado los hechos, y está previsto que los agentes lleven a cabo una inspección ocular a lo largo del día para tratar de recabar pruebas.

La misma empresa sufrió varios sabotajes idénticos en el verano de 2019. Varias embarcaciones aparecieron también rajadas en dos días diferentes. Aquella investigación se archivó al no hallarse pruebas sobre la autoría, ha explicado la víctima. Según sostiene, tras aquel ataque reclamó a Ports de Balears la instalación en la zona de cámaras de seguridad, pero su petición no fue atendida.