Treinta personas han sido detenidas por la Policía Nacional en los controles fronterizos del aeropuerto de Palma desde el inicio del verano. La Policía ha reforzado estos puestos de control para hacer frente al incremento de viajeros y en el primer verano que el Brexit convierte a los ciudadanos británicos en pasajeros extracomunitarios. El último fin de semana fueron arrestadas cinco personas con distintas órdenes de búsqueda, entre ellas un marroquí que trataba de llevarse sin declarar 18.500 euros.

Fuentes de la Policía Nacional informan de que con el inicio de la temporada turística han reforzado los puestos de control fronterizos del aeropuerto para hacer frente al incremento de viajeros. En estos dispositivos han sido detenidos desde que comenzó el verano treinta personas. La mayoría eran ciudadanos albaneses que trataban de viajar a Reino Unido con pasaportes falsos. La Policía Nacional ha detectado que una red organizada de falsificadores utiliza Palma como tránsito para introducir migranes en Gran Bretaña, camuflados entre el intenso flujo de turistas.

El pasado fin de semana los agentes de los puestos fronterizos de Son Sant Joan inspeccionaron y sellaron más de 25.000 pasaportes. En estos controles fueron detectados y detenidos cinco personas que tenían diversas órdenes de búsqueda. Entre ellos se encontraba un ciudadano marroquí, que trataba de viajar a su país, y que estaba reclamado por una estafa en Ciudad Real. El hombre llevaba encima 18.500 euros que no había declarado y cuya procedencia no pudo justificar , por lo que la Policía lo intervino y lo entregó a la Agencia Tributaria.

En estos controles han sido detectados también delincuentes con antecedentes, sobre todo carteristas, que presuntamente viajan a Mallorca para perpetrar hurtos en zonas turísticas.

El trabajo de control de la Policía se ha incrementado especialmente este verano, el primero tras el Brexit, por el que los británicos son considerados ciudadanos extracomunitarios.