Agentes de l Grupo de Robos de la Policía Nacional de Palma han arrestado a un delincuente habitual, presunto autor de una oleada de robos en domicilios en el casco histórico de la ciudad durante las últimas dos semanas. El hombre, con más de treinta antecedentes anteriores, entraba en las casas forzando las puertas o encaramándose a las ventanas, muchas veces mientras los moradores dormían. En una ocasión que fue sorprendido por la propietaria, la amenazó con arrojarle un objeto contundente. La Policía lo puso el pasado sábado a disposición del juzgado de guardia, que decretó su ingreso en prisión.

Según informan fuentes de la Policía, desde finales de junio se había registrado una oleada de robos en el interior de domicilios, siempre en el casco histórico de Palma y en sus proximidades. El ladrón actuaba por la tarde y por la noche. Forzaba la puerta o escalaba hasta una ventana para acceder al interior, y se llevaba el dinero o los objetos de valor de pequeño tamaño que encontraba, como teléfonos móviles.

En varias ocasiones los robos se cometieron mientras los moradores dormían en el interior de los domicilios, y algunos de ellos se despertaron y llegaron a verle, pero el hombre lograba escapar rápidamente. 

Una de las víctimas manifestó a la Policía que se despertó de madrugada por la luz que desprendía su teléfono móvil. Cuando abrió los ojos se encontró con un hombre junto a su cama, que estaba manipulando el terminal. El propietario pidió auxilio a gritos y el intruso huyó saltando desde una ventana del salón.

El sospechoso fue conducido el pasado sábado a disposición del juzgado de guardia e ingresó en prisión

En otra ocasión otra de las víctimas sorprendió al ladrón en el balcón, y le cerró la puerta para impedirle que entrara. El hombre cogió un objeto contundente y amenazó con arrojárselo a través del cristal, pero finalmente se marchó.

Múltiples antecedentes

Durante las últimas dos semanas los agentes del Grupo de Robos recopilaron una decena de denuncias de robos en domicilios que presuntamente correspondían al mismo autor. 

La mayoría de los delitos se cometieron en domicilios del casco histórico de Palma, en las inmediaciones de la plaza de Cort y en la barriada de sa Calatrava, aunque también habría entrado a robar en varias plantas bajas de Santa Catalina. Siempre se llevaba el dinero en efectivo que encontraba, así como relojes, teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos

Los investigadores llevaron a cabo distintas pesquisas que permitieron identificar al sospechoso, un ciudadano marroquí de 32 años. El hombre fue arrestado la semana pasada acusado de nueve delitos de robos con fuerza en casa habitada y otro más de robo con intimidación.

Los agentes comprobaron que el presunto ladrón acumulaba 35 arrestos anteriores, tanto de la Policía como de la Guardia Civil, y todos por delitos contra la propiedad. Tenía también vigente una orden de búsqueda e ingreso en prisión.

El hombre fue conducido el pasado sábado a disposición del juzgado de guardia, que decretó su ingreso en la cárcel.

La oleada de robos en tan corto espacio de tiempo había provocado una gran alarma entre el vecindario de la zona.