Una mujer ha sido condenada a seis años y un día de prisión por intentar traer a Mallorca un alijo de 3,6 kilos de cocaína desde Brasil. La acusada fue interceptada durante cuando hizo escala en el aeropuerto de Madrid, donde se encontró la droga en un doble fondo de su maleta. La procesada, de nacionalidad brasileña, ha alegado durante el proceso judicial que aceptó transportar la droga debido a su «estado de extrema necesidad», pero el tribunal no ha considerado acreditada esta situación.

La traficante cogió un vuelo en la ciudad brasileña de Sao Paulo y su destino final era Palma. El 27 de enero de 2020, a primera hora, aterrizó en el aeropuerto Adolfo Suárez, en Madrid. Allí debía embarcar en otro vuelo hacia Mallorca, pero nunca cogió ese avión. Las fuerzas de seguridad sospecharon de ella en los controles de pasajeros y decidieron inspeccionar su equipaje.

Los agentes descubrieron así que la maleta tenía un doble fondo en todo el contorno, donde la mujer llevaba ocultos 3.670 gramos de cocaína, con una pureza del 58 por ciento y cuyo valor en el mercado negro habría alcanzado los 106.000 euros. La acusada ingresó en prisión provisional por orden judicial.

Su abogado alcanzó un acuerdo de conformidad con la fiscalía y la Audiencia Provincial de Madrid la condenó a seis años y un día de prisión por un delito contra la salud pública con la agravante de notoria importancia.

Pese a que la sentencia fue fruto de un pacto con la fiscalía, la defensa presentó un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). En este alegato, señaló que la mujer había aceptado transportar la cocaína desde Brasil a Mallorca por su «estado de extrema necesidad, motivado por la falta de trabajo y la penuria económica en la que se encontraba» en su país. Además, afirmó que actuó «engañada por terceros que conocían su mala situación». La sala de lo civil y penal del TSJM ha rechazado ahora estos argumentos por falta de pruebas sobre la situación de necesidad alegada y ha confirmado la condena de seis años de prisión.