Un joven de 24 años y vecino de Elche tardará mucho tiempo en olvidar, o tal vez no lo consiga, el terrible mordisco que le dio en su miembro viril otro joven, de 28 años. Ocurrió hace unos diez días en una disputa de madrugada en el barrio de La Puñalá y los sanitarios tuvieron que ponerle tres puntos de sutura en el pene. El presunto agresor ha sido detenido esta semana por la Policía Nacional como autor de un delito de lesiones graves y alegó que fue atacado por dos hombres y tras caer al suelo afirma que se defendió y mordió a uno de ellos, pero sin recordar en qué parte del cuerpo.

Una noche de consumo de alcohol parece estar detrás de este mordisco. El insólito ataque ocurrió sobre la una y media de la madrugada del pasado 14 de abril, durante el toque de queda, y los servicios de emergencia se movilizaron tras recibirse una llamada en el 112 pidiendo ayuda. Al lugar se desplazaron patrullas de la Policía Nacional y Policía Local y se quedaron atónitos mientras escuchaban las explicaciones del joven agredido.

La víctima les relató que se encontraba caminando con su mujer por la vía pública cuando se cruzaron con un conocido de la pareja. Este último se encontraba ebrio y se enzarzaron en una discusión. En la trifulca, el agresor agarró a la víctima por los glúteos y al quedar su cabeza a la altura de la cintura optó por morder en los genitales al otro joven para tratar de salir airoso de la disputa.

El mordisco en el pene se prolongó durante unos eternos segundos, como si se tratara de un perro de presa que no suelta a su víctima. El joven herido aseguró a la Policía que al ver que no dejaba de morder, comenzó a darle una decena de puñetazos en la cabeza para que cesara el ataque. Su mujer también le auxilió y recibió un codazo. Unos sobrinos del agresor también acudieron en ayuda de su tío y continuó la tangana. Al final consiguieron que le soltara, pero aún tuvo tiempo de darle otro mordisco en un brazo. Avisaron al 112 y el agresor se marchó.

La Policía Local, que llegó inicialmente al lugar, participó en la búsqueda del agresor junto con la Policía Nacional y localizó al sospechoso. Procedieron a su identificación y le trasladaron a un centro de salud de Elche porque presentaba signos del forcejeo. No fue detenido en ese momento porque inicialmente las lesiones apreciadas en el pene de la víctima no parecían graves, aunque en un examen posterior se determinó lo contrario y de hecho tuvieron que ponerle tres puntos de sutura. La Policía Nacional tomó declaración a la víctima y a su pareja y hace unos días detuvo al presunto agresor.