La denuncia de la brutal agresión a un agente en Cala Rajada también estuvo acompañada por las denuncias de las carencias que arrastra el Cuerpo desde hace largo tiempo. Así, los sindicatos de la Policía Local de Capdepera reclamaron ayer la dimisión del alcalde. Alguno de los representantes, incluso, sostuvo un cartel entre sus manos con esta reivindicación.

Las distintas organizaciones sindicales de la Policía Local de Capdepera resaltaron que la agresión sufrida responde a las carencias de efectivos. «Solo somos 22 agentes y es un número insuficiente en temporada alta», denunciaron. Así, el día del ataque al policía solo había dos patrullas operativas. Los sindicatos también critican la existencia de amianto en las destartaladas instalaciones policiales.