Un pescador aficionado tuvo que ser rescatado por la Policía Local de Santa Eulària tras caerse al mar este pasado domingo en la zona de Cala Olivera.
Según ha informado el Ayuntamiento en un comunicado, el pescador sufrió varias lesiones y se encontraba exhausto en el momento de ser divisado por los policías, por lo que un oficial se introdujo en el agua para evitar que la corriente arrastrara al hombre mar adentro.
La alerta se activó poco antes de las 10.30 horas, cuando se recibió la llamada de un vecino que explicó que se encontraba pescando junto a un amigo en una zona de rocas cercana a Cala Olivera. El pescador había resbalado y se había precipitado al mar, produciéndose algunas lesiones que, junto con el oleaje, le impedían volver a las rocas.
Inmediatamente se desplazaron hasta el lugar dos patrullas compuestas por tres agentes y un oficial que se dividieron para poder hacer una batida por una zona más amplia. Pocos minutos después, una de las unidades divisó a la víctima, un hombre de 45 años que empezaba a mostrar signos de cansancio.
Aunque ya se encontraba a pocos metros de la orilla, ante el escaso avance del náufrago en dirección a la orilla, el oficial decidió introducirse en el agua y alcanzar al pescador, logrando remolcarlo hasta la orilla. Posteriormente, el 061 se hizo cargo de la víctima que fue trasladada a Can Misses para una revisión aunque, aparentemente, tan sólo presentaba algunas heridas y magulladuras de escasa importancia, así como signos leves de hipotermia.
