El titular del Juzgado de Instrucción número nueve de Palma dejó ayer en libertad con cargos a los dos abogados detenidos por su supuesta relación con una trama de presunta inmigración irregular. La investigación policial apunta a que al menos unos 15 inmigrantes marroquíes habrían regularizado su residencia en Palma a través de esta organización.

A primera hora de la mañana de ayer, la Policía Nacional puso a disposición judicial a los dos abogados, detenidos el pasado miércoles en Palma. Se dio la circunstancia de que el juzgado que estaba ayer de guardia fue el mismo que había instruido las diligencias del caso.

Investigadores de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UCRIF) de la Policía Nacional realizaron el jueves una operación de entrada y registro en el despacho de los abogados en las Avenidas. De hecho, los ordenadores de los letrados y numerosa documentación ha sido intervenida y está siendo analizada.

El ‘cerebro’ de este entramado, de 33 años, se encuentra en prisión provisional desde hace un mes. Se trata de un empresario de gimnasios y de peluquerías low cost con antecedentes por tráfico de sustancias anabolizantes en locales de fitness de Palma y de Calvià. De hecho ya fue detenido por este motivo por la Policía Nacional en 2017. Este individuo habría confesado la presunta relación de estos abogados con su organización.

La Policía intervino los ordenadores de los letrados y numerosa documentación, que está siendo analizada

‘Modus operandi’

El modus operandi de este individuo consistía en captar inmigrantes marroquíes en Palma para fingir una supuesta conciliación en el Tribunal de Arbitraje y Mediación de Illes Balears (TAMIB). Después de pagar 5.000 euros al cabecilla, estas personas lograban fijar su residencia en la capital balear. Los expedientes fueron llevados a la Oficina de Extranjería y se estableció su arraigo laboral. De hecho, un alto funcionario ha declarado el viernes en calidad de investigado por dar el visto bueno a este trámite.

Las sospechas policiales se centraron en torno a ese despacho de abogados debido al gran número de expedientes, que fueron presentados en dicha Oficina de Extranjería y luego fueron regularizados. No obstante, también se encuentra investigado el dueño de una gestoría de Palma por hacer trámites similares.

La mayor parte de estos inmigrantes, que habían sido captados muchos de ellos por un repartidor de comida marroquí de Son Gotleu, denunciaban falsamente a su empleador para buscar una conciliación impostada y, por último, el arraigo laboral. Estos dos abogados, puestos esta mañana en libertad, se habrían encargado supuestamente de estos trámites.

El empresario lanzó acusaciones antes de ir a prisión

El empresario C.L., de 33 años, es un viejo conocido de la Policía. Siempre ha estado ligado al mundo del fitness y fue detenido por tráfico de anabolizantes en 2017 en gimnasios de Palma y de Calvià. Con las restricciones de la covid-19, se decantó por regularizar a inmigrantes con papeles falsos, previo pago de 5.000 euros. Al verse acorralado, lanzó acusaciones a los abogados antes de ingresar en prisión.