El excursionista de 72 años cuya desaparición movilizó durante toda la noche a los equipos de rescate de la Guardia Civil y los Bombers de Mallorca, rechazó subirse al helicóptero cuando fue localizado esta mañana. El hombre dijo que había dormido en un vivac y prefirió seguir caminando hacia donde había dejado el coche. Los guardias civiles le dejaron ir tras comprobar que estaba orientado y en buen estado físico.

La desaparición del hombre, un experimentado excursionista, fue denunciada ayer sobre las diez y media de la noche por su mujer, alarmada porque no había vuelto tras salir en solitario a subir al Puig des Galatzó, en la Serra de tramuntana. De inmediato se puso en marcha un dispositivo de búsqueda en el que colaboraron los equipos de montaña de la Guardia Civil y los Bombers de Mallorca. Este primer operativo, en condiciones muy difíciles por la falta de luz, se suspendió a las cuatro de la madrugada.

Hoy en cuanto amaneció volvieron a salir, en este caso con la ayuda del helicóptero de la Guardia Civil. Desde la aeronave le localizaron finalmente sobre las nueve y diez de la mañana. Dos guardias civiles descendieron y hablaron con él. El hombre se sorprendió al saber que le habían estado buscando toda la noche. Explicó que cuando se quedó sin luz había perdido el camino, por lo que se había improvisado un refugio y había descansado allí hasta que se hizo de día. Añadió que se encontraba bien y que no necesitaba ayuda.

Los guardias se ofrecieron a llevarle en el helicóptero hasta el lugar donde tenía el coche, pero el excursionista prefirió ir caminando. Los agentes comprobaron que estaba bien físicamente y orientado, por lo que le dejaron seguir su camino.