Los tres acusados de haber torturado hasta la muerte al gato ‘Grisito’ el pasado mes de agosto en Manacor volvieron a proclamar su inocencia ayer ante el juez que investiga el caso. Todos negaron haber agredido al animal y apuntaron que fue atropellado por un coche. Varios agentes de la Policía Local de Manacor que acudieron aquel día al lugar pusieron en duda esta versión, ya que a su juicio las lesiones del felino no eran compatibles con un atropello, y afirmaron que los sospechosos ofrecieron entonces versiones contradictorias.

Los tres jóvenes prestaron declaración como investigados en un juzgado de instrucción de Manacor por un delito de maltrato animal. Están acusados de haber atado al gato para luego darle numerosos golpes y sacarle un ojo en la madrugada del pasado 8 de agosto en la calle Artà de la localidad. Un vecino los identificó como los autores de la agresión y dos de ellos fueron detenidos.

El caso generó una gran indignación en la capital del Llevant, donde se celebró una concentración para pedir justicia.