La fiscal pidio ayer, en la segunda sesión del juicio celebrado en la Audiencia de Palma, una pena de 18 años de prisión a un acusado por pagar por sexo a menores, la mayoría de ellas tuteladas. Mientras, otro encausado admitió que tenía relaciones de tipo fetichista con las menores y aceptó un acuerdo de conformidad y una pena de un año y medio de prisión.

As, la representante del ministerio público solicitó para el principal acusado, nigeriano de 39 años, una pena de seis años de prisión por corrupción de menores a tres adolescentes de más de 16 años y tres años por este mismo delito a una chica de 14. Además, la fiscal reclamaba nueve años de prisión por un presunto delito de abuso sexual sobre esta última.

El juicio quedó suspendido hasta ayer el no haber comparecido ante el tribunal la menor que entonces contaba con 14 años, cuyo testimonio se consideró fundamental. Esta adolescente declaró que se trató de sexo consentido a cambio de dinero y afirmó que había mentido sobre su edad había dicho al hombre que tenía 18 años y que los cumplía ese mismo día.

La adolescente, que ahora cuenta con 16 años, aseguró que el encuentro sexual lo mantuvo en la habitación de un hotel de Magaluf. Al día siguiente, una amiga llegó al establecimiento hotelero y ambas subieron a las redes una foto en un jacuzzi con unos 600 euros en billetes.

Un investigador de la Guardia Civil declaró que dos de estas menores reconocieron que habían mantenido relaciones sexuales completas con este hombre en al menos dos ocasiones.

Por su parte, el abogado defensor del principal acusado criticó que su cliente no fuera tratado como el otro encausado y no se le hubiera apreciado la atenuante de error vencible, al desconocer, supuestamente, que se trataba de menores de edad. El letrado también reclamó las atenuantes de reparación del daño, al haber depositado 5.000 euros y colaboración con la Justicia.