Tres jóvenes maniataron y torturaron el miércoles por la noche a un anciano de 70 años en su casa de Sóller y le robaron unos 12.000 euros. Los asaltantes, que iban encapuchados, inmovilizaron a la víctima, le propinaron varios golpes y le causaron quemaduras para que revelara dónde guardaba el dinero. Tras la huida de los delincuentes, el hombre logró liberarse y pedir ayuda. Fue trasladado al hospital Son Llàtzer, donde recibió el alta horas después. La Guardia Civil investiga la autoría del atraco y sospecha que los delincuentes habían planificado a conciencia el robo y tenían valiosa información sobre la víctima.

Los hechos, según informaron fuentes policiales, ocurrieron el miércoles por la noche en una casa apartada a las afueras de Sóller, en una zona conocida como sa Vinyassa, junto a la carretera de Fornalutx. Según el relato ofrecido por la víctima a los investigadores, tres hombres jóvenes que llevaban el rostro cubierto irrumpieron en su domicilio. Los intrusos se comportaron de manera muy violenta. Primero maniataron a la víctima para evitar que pudiera escapar y pedir ayuda. Luego le propinaron numerosos golpes en varias partes del cuerpo e incluso llegaron a causarle quemaduras, al parecer con cigarrillos.

Mientras lo torturaban, los delincuentes le exigían a gritos que revelara dónde tenía guardado el dinero. El septuagenario acabó cediendo y les dio la información. Los atracadores consiguieron así hacerse con una importante suma de dinero en metálico, que las fuentes consultadas cifran entre los 10.000 y los 12.000 euros. Según parece también se llevaron algunas joyas y otros objetos de valor.

Los ladrones se dieron a la fuga rápidamente con el botín, dejando al anciano atado y abandonado a su suerte. El hombre consiguió liberarse unos minutos después y alertó de lo ocurrido a los servicios de emergencias. Al lugar acudieron enseguida patrullas de la Policía Local y la Guardia Civil de Sóller, así como una ambulancia.

Los efectivos sanitarios comprobaron que el hombre presentaba numerosos golpes por todo el cuerpo y también quemaduras en las extremidades. El anciano fue trasladado al hospital Son Llàtzer, donde fue sometido a varias pruebas para conocer el alcance exacto de las heridas. Los médicos descartaron que las lesiones pusieran en peligro su vida y, tras permanecer unas horas ingresada, la víctima recibió el alta.

Tenían información

La Policía Judicial de la Guardia Civil ha puesto en marcha una investigación para aclarar la autoría del violento atraco. Los investigadores han llevado a cabo una detenida inspección ocular de la vivienda donde ocurrieron los hechos para tratar de recabar alguna prueba que permita identificar a los delincuentes. Además, tenían previsto tomar declaración formalmente a la víctima para que aporte todos los datos posibles sobre los agresores y peinar la zona en busca de posibles testigos.

Los agentes encargados del caso sospechan que los tres atracadores habían planificado el golpe a conciencia y que contaban con valiosa información sobre la víctima y sus movimientos, a la que habrían estado vigilando. Según esta hipótesis, sabían que el hombre tenían guardada en casa una importante cantidad de dinero y que estaba solo en la vivienda, lo que les facilitaba la comisión del asalto. Los agentes han empezado a indagar en el entorno del anciano en busca de posibles sospechosos.