El incendio forestal declarado hace cuatro días en Almonaster la Real (Huelva) es considerado el más grave del verano en España, con 10.000 hectáreas arrasadas por las llamas, lo que ha obligado a evacuar de forma preventiva a 3.150 vecinos de las zonas afectadas.

El incendio, que comenzó el pasado jueves, sigue activo, siendo el frente sur, el más cercano a la Zarza, "el que más preocupa" según las palabras de la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo.

Y no se prevé una estabilización a corto plazo, ya que las condiciones meteorológicas siguen siendo poco favorables para los trabajos de extinción, en las que participan 250 efectivos del Infoca, 157 militares de la Unidad Militar de Emergencias (UME), 20 bomberos de Consorcio Provincial contra Incendios de Huelva y 25 medios aéreos.

"Si mejoraran se podría avanzar en la estabilización a lo largo de esta noche o mañana, pero si siguen como hasta ahora, con vientos con fuerza y rachas por encima de 50 kilómetros por hora rolando en distintas direcciones, tardará más", ha apuntado el director del Centro Operativo Regional del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios Forestales de Andalucía (Infoca), Juan Sánchez.

Un incendio que se estima que tiene una extensión de unas 10.000 hectáreas, pero "es muy irregular", por lo que "hablar de una medición de superficie afectada es muy difícil", apostilla Sánchez.

Los últimos desalojos se han producido en los términos municipales de Valverde del Camino y Calañas (Huelva) y la delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Huelva, Bella Verano, ha precisado que todos ellos son "preventivos, no porque esté el incendio inminentemente en estas zonas".

De este modo, son seis municipios los que ya han sufrido desalojos por el incendio declarado en el paraje de Olivargas de Almonaster la Real y hasta 13 los núcleos poblacionales afectados.

Las evacuaciones siguen afectando a Mina Concepción, Cueva de la Mora y Monteblanco (tres aldeas de Almonaster la Real), Traslasierra en El Campillo, El Villar, El Pozuelo y El Buitrón, en Zalamea la Real, además de La Zarza-El Perrunal, los núcleos residencias de Los Pinos, La Florida, Los Campiños y Puerto Blanco en Valverde del Camino y la pedanía de Sotiel Coronada en el municipio de Calañas.

El responsable del Infoca ha señalado que "no se prevén nuevos desalojos", si bien ha destacado que están tomando decisiones "que cambian continuamente en función de cómo evoluciona el incendio", por lo que si fuese necesario alguna evacuación más se realizaría".

Este es, sin duda, el incendio más virulento que sigue activo en España, aunque hay otras comunidades que también trabajan para sofocar otros fuegos, como el declarado ayer por la tarde en la Sierra de la Silla, entre Mula y Bullas, en Murcia, que ya ha quemado y unas 300 hectáreas y ha obligado a desalojar a 70 personas de 17 viviendas.

El difícil acceso por tierra a causa del humo está complicando las tareas de control de un incendio con un frente activo de seis kilómetros y contra el que luchan casi 300 efectivos (150 de la comunidad autónoma y 140 de la UME), así como medios aéreos.

Por otra parte, la situación parece que mejora en los dos incendios activos en Cáceres. El de la comarca de Las Hurdes se ha dado por estabilizado, mientras las labores de lucha contra el que afecta a las comarcas de La Vera y el Valle del Jerte evolucionan favorablemente.

La Junta de Extremadura ha autorizado este domingo el regreso a sus viviendas de los más de 60 vecinos desalojados de las alquerías de Horcajo y Avellanar, después de analizar y comprobar la evolución favorable de la labor de los medios terrestres que trabajan contra el incendio.

El incendio de Cabezuella del Valle, entre las comarcas de La Vera y el Valle del Jerte, mantiene el nivel 2 de peligrosidad y en él trabajan medios terrestres y aéreos para intentar estabilizarlo.

Aunque evoluciona favorablemente, el fuego muestra complicaciones en su zona norte debido a la orografía del terreno y a posibles reproducciones a lo largo del día.

Finalmente, se ha dado por controlado el incendio que afectaba en Galicia a unas 30 hectáreas en las localidades de Crecente (Pontevedra) y Cortegada (Ourense); y también el declarado el pasado viernes por la noche en el término municipal de Benimantell (Alicante), y que ha afectado a 150 hectáreas.