Un total de 11 detenidos en la redada antidroga realizada el pasado jueves en Camp Redó han pasado esta mañana a disposición judicial. La operación policial contra el tráfico de marihuana se extendió también a Son Banya, Son Ferriol y Santa Maria. La investigación policial continúa abierta y no se descartan que se produzcan nuevas detenciones.

Las detenciones se efectuaron el pasado jueves en una actuación conjunta de Policía Nacional y Policía Local de PalmaEl barrio palmesano de Camp Redó, conocido por Corea, quedó tomado por un centenar de policías. Los agentes desmantelaron cinco puntos de venta de droga. Intervinieron 500 plantas de marihuana, cuyo peso alcanzó los 15 kilos, en los 15 registros domiciliarios practicados.

Los clanes de La Mare y El Pollo copaban el tráfico de marihuana en Camp Redó. Contaban con una perfecta infraestructura para facilitar el crecimiento de las plantas. Los enganches ilegales a la red eléctrica les suministraban la energía necesaria para dotar de energía a los aparatos que agilizaban el desarrollo del cannabis sativa.

Según fuentes de la investigación, estos clanes habían puesto a menores en algunos puntos de venta para el menudeo de droga. De esta manera estas organizaciones consiguieron importantes beneficios con el tráfico de estupefacientes.

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