Un escurridizo traficante de hachís alternaba la venta de la sustancia estupefaciente en establecimientos, en domicilios y en la vía pública de Can Pastilla. Tras una actuación conjunta de Policía Nacional y Policía Local de Palma, el narco, de 47 años, fue detenido el viernes y se le intervinieron 600 gramos de hachís y una importante cantidad de dinero en efectivo.

Tras recibir numerosas quejas vecinales referentes a la presunta venta de estupefacientes de un individuo en Can Pastilla, una investigación conjunta de efectivos del Grupo II de Estupefacientes de la Policía Nacional y de Policía Local de Palma se inició en torno a este sujeto. El dispositivo de seguimientos y de vigilancias se prolongó durante varias semanas.

El continuo cambio de escenario de este traficante complicó sobremanera la labor de los investigadores. Finalmente, las pesquisas dieron sus frutos. El sospechoso fue sorprendido cuando se disponía a realizar una venta de droga en las proximidades de su domicilio. A continuación, fue detenido por un presunto delito contra la salud pública.

Durante la entrada y registro del traficante intervinieron 600 gramos de hachís. Una parte estaba prensada en formato de tableta y otra parte a modo de dátil. Los investigadores también hallaron en el inmueble una importante cantidad de dinero en efectivo obtenido, presuntamente, de la venta de la sustancia estupefaciente. Los billetes los guardaba en una caja fuerte.

Venta en movimiento

La actuación de este presunto traficante de droga había causado un profundo malestar en el vecindario de Can Pastilla. En torno a este sospechoso pululaba una gran cantidad de compradores de hachís. Muchos de estos consumidores acudían a una zona concreta para adquirir la droga. La dispensaba, en ocasiones, en el portal de su domicilio o en movimiento por la calle. Este complejo método complicó la labor de los investigadores hasta que fue detenido.