Una finca rural de Sineu había sido utilizada para un monocultivo: marihuana a gran escala. La Guardia Civil desmanteló la plantación e intervino 272 ejemplares de cannabis sativa en fase de crecimiento. Un hombre ha sido imputado por un presunto delito contra la salud pública.

A raíz de numerosas investigaciones realizadas, efectivos del instituto armado llegaron a la conclusión de que una finca rural de la localidad mallorquina de Sineu se podría estar dedicando al cultivo intensivo de marihuana para su posterior venta. Algunas de estas indagaciones después de intervenir la sustancia estupefaciente a algunos consumidores señalaban a esta parcela.

Una finca aislada en el campo

A continuación, los investigadores de la Guardia Civil activaron la fase de explotación y se dirigieron hacia el lugar señalado. Las sospechas no tardaron en confirmarse por completo. Una finca aislada en el campo había sido reconvertida para el cultivo intensivo de marihuana.

Asimismo, en el momento de la irrupción de los efectivos del instituto armado en la finca se encontraron con el responsable del cultivo. La parcela albergaba 272 plantas de marihuana que se encontraban aún en fase de crecimiento.

Todos los indicios recabados por los investigadores apuntaban a que desde esta finca se suministraba marihuana a consumidores de localidades próximas. Se trataba de un cultivo intensivo y la situación aislada de la finca le proporcionaba al encargado una considerable sensación de impunidad. Los agentes intervinieron las 272 plantas en fase de crecimiento y le imputaron un delito contra la salud pública.