La Guardia Civil localizó durante la semana pasada dos artefactos explosivos en las costas de Balears. Uno de ellos, una carga antisubmarina de procedencia italiana que podría datar de la Guerra Civil o la Segunda Guerra Mundial, se encontraba a apenas cien metros de la costa de Portopí, en Palma, y fue explosionado de forma controlada por especialistas de la Benemérita y la Armada. El segundo proyectil, en este caso sin capacidad destructiva, apareció en un acantilado de Menorca.

Según informa la Guardia Civil el primer artefacto fue localizado por un pescador submarino a unos cien metros mar adentro, frente a la costa de Portopí, en Palma. Este hombre se quedó sorprendido por el hallazgo, ya que era su zona habitual de pesca y no lo había visto nunca antes.

Un equipo del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil localizó el proyectil siguiendo las indicaciones del pescador, balizó el lugar y alertó a sus compañeros del Grupo de Desactivación de Explosivos (Gedex). Los expertos lo identificaron como una carga de profundidad antisubmarinos italiana modelo K-113, de aproximadamente un metro de longitud. Se trataba de un artefacto antiguo, probablemente procedente de la Guerra Civil o de la Segunda Guerra Mundial.

Ante la posibilidad de que mantuviera su capacidad explosiva, se activó el protocolo de actuación entre la Guardia Civil y la Armada para proceder a su destrucción.

Un equipo integrado por buceadores del GEAS y técnicos del Gedex y de la Unidad de Desactivación de Explosivos de la Armada (EOD), desplazados desde su base en Cartagena, puso en marcha la operación. El proyectil fue trasladado a una zona más profunda donde se estableció un perímetro de seguridad y fue explosionado de manera controlada mediante una carga adosada.

El segundo artefacto fue hallado en una zona de acantilados de Menorca. Tras recibir el aviso, los buzos del GEAS lo localizaron. De nuevo fue inspeccionado por especialistas en explosivos de la Armada, que en este caso determinaron que no representaba ningún riesgo, por lo que fue extraído.

Desde la Guardia Civil recuerdan que esta clase de hallazgos no son excepcionales en aguas de Balears. La Benemérita recalca que estos artefactos no deben ser manipulados nunca, y solicita que se alerte de inmediato a su central de emergencias o al 112.