La Policía Nacional, en colaboración con la Policía Local de Palma, ha desmantelado un búnker del clan de El Pablo en la Soledad: un almacén de 200 metros cuadrados en el que se cultivaban 2.000 plantas de marihuana, de las unas 500 tenían una altura de tres metros, con puertas de máxima seguridad, paredes reforzadas y entradas secundarias tapiadas. Esta operación, en la que ha sido detenido el supuesto encargado del cultivo, ha dejado sin abastecimiento a una veintena de puntos de venta de droga de la ciudad.
Los investigadores de la Policía tenían localizado un domiclio de la calle Aragón, donde sospechaban que el clan de El Pablo cultivaba y almacenaba una gran cantidad de marihuana. Pero habían constatado que la finca contaba con grandes medidas de seguridad, como puertas blindadas y otros accesos tapiados, que dificultaba sobremanera un allanamiento a la fuerza.
Los policías optaron por mantener el lugar bajo una vigilancia discreta y el jueves, sobre las ocho y media de la tarde, se presentó la oportunidad propicia. Uno de los miembros de la organización llegó al búnker y abrió las puertas blindadas con una llave maestra. Poco después, cuando el hombre sa marchaba apresuradamente del lugar, los agentes le estaban esperando.
El sospechoso fue interceptado a unos 50 metros de la casa por agentes de la Policía Nacional y Policía Local de Palma. Llevaba encima casi un kilo de droga y, lo más importante, las llaves del búnker.
Se puso en marcha un registro con autorización judicial. Los investigadores entraron en la casa y se encontraron con un almacén de unos 200 metros cuadrados, completamente abarrotado de plantas de marihuana. En total había unos 2.000 ejemplares en distintos estadios de crecimiento. Unas quinientas de ellas tenían más de tres metros de altura.
Los investigadores comprobaron que la plantación contaba con un sofisticado sistema de iluminación y ventilación, con focos halógenos para acelerar el crecimiento de la marihuana. Se cree que se trata del buque insignia del clan de El Pablo, su principal centro de producción de droga. Las puertas eran de máxima seguridad, las paredes estaban reforzadas y las entradas secundarias habían sido tapiadas.
Además de las plantas había decenas de kilos de marihuana preparadas para su venta.
Los investigadores consideran que con esta operación se ha cortado el abastecimiento de una veintena de puntos de droga distribuidas por toda la ciudad.
El presunto encargado del almacén, un hombre de 40 años, quedó detenido. Las investigaciones continúan abiertas y no se descartan más arrestos.
